El Ayuntamiento de Gandia no se atreve a modificar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) en el punto que dice que la playa de l'Auir es suelo urbanizable. La intención es hacerlo para clasificar esa franja litoral situada al norte del término como suelo no urbanizable protegido, evitando definitivamente los posibles intentos de construir, como el que en la pasada legislatura manifestó el Gobierno del PP con el alcalde Arturo Torró a la cabeza.

El problema es que dar ese paso podría obligar a millonarias indemnizaciones a los propietarios de la playa, que perderían su legítimo derecho a presentar y ejecutar un plan urbanístico acorde con las condiciones que el ayuntamiento fija en su PGOU.

Por eso el nuevo Gobierno local, contrario a la urbanización y partidario de declarar l'Auir zona verde, ha buscado la complicidad de otra administración, en este caso la Generalitat, para poder impulsar el cambio sin que eso le acabe costando una millonada.

Según reveló ayer la Conselleria de Territorio que dirige María José Salvador, el plan consistiría en que la Generalitat incluya la playa de l'Auir en el futuro Plan de Acción Territorial de Ordenación del Litoral de la Comunitat Valenciana como un espacio a preservar «por su valor ambiental y paisajístico». En esa misma situación se encontrarían otras playas que han podido librarse del hormigón y que aún carecen de planes urbanísticos aprobados.

Si el Consell de la Generalitat aprueba ese Plan de Acción Territorial con una playa de l'Auir protegida, entonces sería el ayuntamiento el que daría el siguiente paso y cambiaría el PGOU, de manera que l'Auir pasaría de suelo urbanizable a no urbanizable, al tiempo que se cubriría las espaldas para evitar indemnizar con el argumento de que cumple con un mandato que le llega de la Administración autonómica.

Lógicamente, eso no priva de derechos a los propietarios de los terrenos afectados, que siempre podrían exigir que se les compense económicamente. La diferencia es que la demanda iría dirigida a la Generalitat.

Precisamente hace una semana el Ayuntamiento de Gandia, a propuesta del concejal de Ciudadanos, Ciro Palmer, pidió que se declarara la playa de l'Auir zona no urbanizable. Los dos partidos en el Gobierno, PSPV y Més Gandia, señalaron entonces el riesgo de tener que pagar indemnizaciones, de manera que el tema quedó sobre la mesa.

El campo de golf, tampoco

El complejo asunto de convertir en no urbanizable la playa de l'Auir fue tratado ayer en una reunión entre la consellera Salvador y la alcaldesa de Gandia, Diana Morant. En ese encuentro, del que hoy se darán más explicaciones, la primera mandataria de Gandia también expresó la voluntad del gobierno que preside de modificar el Plan de Usos del Marjal que aprobó el PP en la pasada legislatura e impedir que se pueda construir un campo de golf en esta zona húmeda, como también impulsó el exalcalde Arturo Torró.