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La asociación contra el ruido advierte a la alcaldesa de que no dé pasos atrás

La entidad de la playa de Gandia entra en el debate sobre el horario de los negocios y dice que la única solución es sacar a pubs y discotecas de áreas residenciales y cumplir la ordenanza aprobada

La Asociación de Vecinos por la Convivencia de la playa de Gandia, que lucha desde hace años por reducir el ruido, el botellón y el vandalismo que tantas quejas ocasiona, pidió ayer a la alcaldesa de la ciudad, Diana Morant, que no dé pasos atrás y que mantenga la «hoja de ruta» a la que se comprometió en su día.

Entrando de lleno en el debate generado en los últimos días a raíz de las potestas de empresarios de la hostelería, que consideran que este verano ha existido un cierto «acoso» de la Policía Local en el estricto cumplimiento de los horarios y en la colocación de terrazas en espacios públicos, a la asociación vecinal no le ha sentado bien que la alcaldesa haya abierto la posibilidad de modificar esos horarios para flexibilizarlos y atender así algunas de las reivindicaciones de los empresarios.

«Nosotros no vamos a dejar de defender nuestro derecho al descanso por muchas presiones que recibamos, vengan de donde vengan», señaló ayer la asociación vecinal en un comunicado.

La entidad que preside Paco Pajares exigió al Gobierno local «que cumpla con lo que comprometieron y firmaron el 15 de agosto del año pasado junto a nosotros», y le recordó que esa «hoja de ruta» que suscribieron los dos partidos que ahora dirigen el Ayuntamiento de Gandia es que los pubs y discotecas «terminen saliendo de las zonas residenciales», que se apruebe una ordenanza para controlar el alquiler de apartamentos turísticos, que desaparezca el botellón y que se aplique la ordenanza aprobada en junio del 2012 sobre el horario de establecimientos.

La asociación vecinal también rebate a la Asociación de Empresarios de Hostelería y Turismo de la Safor, que quiere tener más margen legal para no tener que cerrar sus negocios, el argumento de que crean puestos de trabajo y riqueza. «Mantiene más puestos de trabajo y generan más riqueza los miles de propietarios de apartamentos de la playa que las decenas de pubs y discotecas», indican los vecinos, quienes se muestran convencidos de que «el actual problema del turismo de borrachera y del botellón, causante del ruido y vandalismo que sufrimos en la playa, no se va solucionar en un día, pero para que termine algún día hay que ponerse a trabajar ya».

El binomio descanso y negocio

El posicionamiento de empresarios y vecinos, a quienes separa el modelo turístico de Gandia, no hace más que evidenciar lo complicado que resulta compaginar la actividad empresarial que se prolonga hasta la madrugada con el descanso de las personas que residen en los apartamentos situados en las cercanías de los locales.

En medio de estos dos «bandos», un ayuntamiento que promete combatir el ruido pero también dispuesto a garantizar la actividad económica que se genera en la playa en los meses del verano y que supone una importante fuente de riqueza. Con ese objetivo, los empresarios hosteleros han solicitado una reunión con la alcaldesa de la ciudad.

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