Padres y alumnos del colegio público el Castell de Almoines protagonizaron en la tarde de ayer la primera protesta llevada a cabo en la Safor contra el nuevo Consell de la Generalitat del PSPV-PSOE y Compromís, para denunciar inactividad y deficiencias en un centro escolar.
La concentración, que se produjo a las 4 de la tarde, cuando terminó el horario escolar, tenía como objetivo exigir a la Conselleria de Educación que dirige Vicent Marzà que instale lo antes posible un aula prefabricada, popularmente conocidas como barracones, para dar cabida a todos los alumnos en condiciones mínimamente aceptables. Y, paralelamente, exigir que se inicien las gestiones para redactar, aprobar y ejecutar un proyecto de ampliación del colegio el Castell.
Según cuenta a este periódico la presidenta de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA), Blanca Llorca, el colegio remitió el pasado mes de febrero la petición para que se instalara el barracón, pero, sorprendentemente, no se tuvo en cuenta. La Conselleria de Educación señala que hasta el 2 de septiembre no tuvo constancia de la entrada de esa petición y que es a partir de esa fecha cuando se iniciaron los trámites para darle cumplimiento. Llorca señala que, según la información que le ha transmitido la Generalitat, en estos momentos se ha licitado un nuevo paquete de barracones en el que entrará el de Almoines. Mientras tanto, los alumnos tienen que ocupar un aula de reducidas dimensiones destinada a dar clases de inglés. Los de sexto de Primaria usan el aula de música y el inglés se imparte en el recibidor del colegio.
La protesta fue por la tarde, pero durante la mañana la presidenta del AMPA, acompañada de otros miembros de la entidad, se desplazaron a la sede de la Conselleria de Educación, en Valencia, en donde entregaron un pliego de 871 firmas que exigen el barracón y la ampliación del colegio.
