La propuesta que la concejala socialista Ana Morell planteó en el pleno de Oliva del jueves pasado para evitar una subida del impuestos del 7 % en el IBI de urbana y rústica está fuera de la ley.
Esa es la clara conclusión a la que llega el concejal de Hacienda, Vicent Canet, de Compromís, después de haber leído el informe técnico redactado por la Intervención del ayuntamiento solicitado expresamente por el alcalde de la ciudad, David González, para saber si la iniciativa de Morell podía llevarse a cabo.
Como informó este periódico el pasado sábado, Morell planteó destinar 1,6 millones de euros del remanente de tesorería para liquidar créditos bancarios. Con esa acción el ayuntamiento se ahorraría más de 700.000 euros, que es la cantidad total que se va a recaudar el año que viene con la subida del recibo del IBI aprobada por el ayuntamiento la semana pasada.
Del informe firmado ayer por la interventora se desprende claramente que esa propuesta «va contra la legislación vigente» porque el ahorro de amortizar los préstamos no puede destinarse a gastos ordinarios. Y justamente para eso necesita dinero el ayuntamiento, obligado a tener que incrementar lo que destina para mantenimiento de servicios básicos a la ciudadanía, entre ellos un plan para repintar los pasos de cebra de en distintos puntos de la ciudad.
Señala el concejal Canet que esa medida planteada por Ana Morell «no tiene nada de novedosa» porque «era una posibilidad que se peleaba desde la aprobación de la liquidación del presupuesto de 2014, siendo Morell concejala de Hacienda, cuando ya se llegó a la conclusión de que no era viable.
Además, Canet recriminó a la concejala socialista la forma «secreta y clandestina» de presentar su propuesta, en el último momento del pleno en que se votó la nueva ordenanza fiscal que regula el IBI y «sin facilitar la documentación al resto de los grupos municipales», algo que, según señaló el representante de Compromís, «contraviene lo que ella misma siempre había sostenido, que no se debían llevar propuestas al pleno sin que estuvieran previamente informadas por Intervención».
Además, el actual responsable de Hacienda de Oliva señala que, de no modificarse la ordenanza fiscal del IBI, se perpetuaría «el agravio comparativo» existente entre las casas construidas en suelo urbanizado y las que están fuera de ordenación, en grupos diseminados o en parcelas agrícolas, que hasta ahora tributaban con un tipo impositivo inferior en un 55 % a las viviendas situadas en suelo urbano.
Aparte de dejar clara la imposibilidad legal de destinar a gastos ordinarios el ahorro producido por la amortización de préstamos, el informe de Intervención también señala que la única manera de incrementar esa partida municipal es a través de cambios en las ordenanzas que supongan aumentos permanentes de la recaudación, lo que pasa necesariamente por más impuestos o más tasas.
