Más de 1.500 familias de la ciudad de Gandia sufren problemas para poder pagar el consumo eléctrico. Además del evidente problema que conlleva la posibilidad de que les corten la luz, la situación puede agravarse de cara la invierno, si, con la llegada del frío y la necesidad de encender los aparatos para calentar las viviendas, no se puede hacer frente a las facturas eléctricas.

Las cifras las ofreció ayer el concejal de Responsabilidad Social, Nahuel González, quien explicó que hasta el próximo mes de diciembre será Cruz Roja quien se hará cargo de hacer frente a ese gasto de aquellas familias con una mayor falta de recursos.

A partir de entonces, estas quedarán en manos de la Generalitat y la Diputación de Valencia, que están elaborando un plan de manera conjunta para hacer frente a este problema. «Esperamos que nos lleguen las ayudas y que se hagan cargo de los casos más sangrantes de pobreza energética» apuntó González.

Sin embargo, el edil aseguró que no va a esperar a que las administraciones superiores acaben de elaborar el plan, por ello, a nivel local y desde su departamento se mantendrán reuniones con empresa suministradora con la intención de llegar a acuerdos que sirvan para paliar la grave situación por la que atraviesan muchas familias de la ciudad.

Nahuel González anunció también la adhesión de Gandia a la Red de Municipios por la vivienda digna y la pobreza energética.

Dentro de este programa, desde el departamento que él dirige se está elaborando un listado riguroso de todas las viviendas vacías que hay Gandia con el objetivo de llegar a acuerdos con los propietarios y solucionar el problema de las familias que se quedan sin casa por la situación económica.

La pasada semana se celebró en Terrassa un encuentro de ciudades de más de 50.000 habitantes que afrontan este problema. Los representantes del Ayuntamiento de Gandia asistieron para aprender de la experiencia otras ciudades. De la reunión salió una línea de trabajo, que ya está en marcha, para diseñar un protocolo de actuación. Las experiencias de la ciudad de Bilbao y Córdoba servirán de guía.

Esta red de ciudades tiene como objetivo principal el de presionar a los gobiernos autonómicos y central para fomentar y desarrollar herramientas en materia de vivienda, desde legislación hasta financiación, así como crear un espacio de puesta en común para compartir experiencias en la gestión de la materia.

González cree que es la administración local la que debe impulsar estas políticas, en tanto que es la que mejor conoce las problemáticas de sus vecinos.