Frío, viento, lluvia y granizo. La sensación del invierno aterrizó ayer plenamente en la comarca de la Safor en una jornada en la que los termómetros cayeron de madrugada hasta los 2,6 grados registrados en una estación meteorológica de Marxuquera, en el término de Gandia, y que apenas si llegaron a alcanzar los 13 grados a mediodía. El viento, además, incrementó la sensación gélida.

Aunque a primera hora cayeron algunas gotas en la franja sur de la comarca, fue a partir de mediodía cuando la precipitación adquirió un régimen tormentoso, con intensidades considerables que barrieron la comarca casi por completo. A ratos esa lluvia cayó acompañada de granizo, lo que hizo temer que pudiera causar daños en áreas citrícolas.

En la misma zona de Marxuquera se midieron 19,8 litros por metro cuadrado, mientras que en Ròtova cayeron 11,4. Al sur de Oliva se registraron 10 litros, y 4,4 en el pantano de Beniarrés. Meteorología anuncia que no habrá lluvias en los próximos días y que las temperaturas se suavizan.