El Ayuntamiento de Gandia decidió ayer abrir de lunes a viernes, en horario de 9 a 14 y de 16.30 a 19 horas, las oficinas de información y atención para que las familias tramiten la ayuda de hasta 100 euros por la adquisición de libros de texto, a los que se sumarán otros cien euros más a final de curso si los libros se entregan al colegio en buen estado.

La medida adoptada por el Gobierno local gandiense evidencia bien a las claras el «zafarrancho» que se ha tenido que habilitar en muchos municipios, especialmente los de mayor población, para poder atender debidamente las peticiones de ayudas, dado que en las localidades pequeñas se estima que hay tiempo de sobra hasta finales de diciembre para tramitar todas las instancias dirigidas a la Generalitat.

En Gandia se espera, desde hoy, más de ocho mil peticiones, de ahí que el Gobierno local se haya visto obligado a situar dos puntos de recogida de solicitudes. Uno estará en la planta baja del ayuntamiento y otra en las dependencias municipales del Grau, junto al las oficinas del Instituto Social de la Marina. Además, en el departamento de Educación, situado en la calle Tossal, habrá una oficina de información.

«El número de funcionarios que atenderán será variable», señalaron ayer los concejales José Manuel Prieto y Laura Morant, encargados de coordinar el dispositivo. Los dos explicaron que la instrucción dada a los trabajadores municipales es que colaboren con los padres y, en su caso, ayuden a cumplimentar todos los datos de la solicitud, incluyendo la descarga del documento y su posterior rellenado. Serán válidos las solicitudes con datos escritos a mano.

Los peticionarios deberán estar empadronados en cada uno de los municipios desde antes del 27 de octubre de este año, y es fundamental disponer del documento justificativo, factura o fotocopia compulsada del dinero pagado por la compra de los libros. También de la cartilla o extracto bancario con el número de cuenta en el que, a partir del 1 de enero, se ingresarán los 100 euros.

Como publicó el domingo pasado este periódico, en Oliva la oficina se ha montado en el salón de plenos del ayuntamiento y se ha secuenciado la llegada estableciendo días concretos para cada uno de los colegios, hasta el 15 de diciembre. En Tavernes de la Valldigna el dispositivo será en la casa de la cultura y se prolongará hasta el 30 de diciembre.

En estas dos ciudades también se ha previsto un refuerzo del personal dedicado a esa función con el fin de evitar aglomeraciones, aunque los concejales responsables reconocen que puede haber momentos de largas colas y por eso piden paciencia.