El otro día, la señora Diana Morant presentó una de esas ocurrencias que tienen los que intentan escurrir el bulto porque no saben más y piensan que liando un poco la madeja o tirando balones fuera pueden salir endebles del problema, una macro reunión de turismo con todos los sectores, a los que les compete y a los que no, ¡ahhhh! y con Podemos.
Pero hay temas que son tan evidentes, se les ha visto tanto el plumero, que ya no engañan ni al famoso niño del congreso. Este es el caso de los socialistas de Gandia.
Primero fue la señora Pepa Frau, después el señor José Manuel Orengo y ahora la desaparecida Diana Morant.
A lo que vamos, todo el mundo crítica en Gandia, que la playa se hunde, que el tema turístico no funciona, que Gandia está muerta, etc. Todos estos temas son el comentario diario en la calle y esta mujer y las personas que la acompañan hacen lo de siempre, un foro de turismo, invitan a todos los sectores, da igual que les afecté, que no; el tema es salir del conflicto y de la crítica social, embarran el campo para perderse en él e intentan salir por la banda como siempre, sin ser vistos.
La diferencia es que Frau y Orengo gobernaron en la era la de las vacas gordas y ahora sólo subsisten las buenas iniciativas, los valientes y la imaginación, y eso no se arregla con macro reuniones estratégicamente preparadas, escenas de sofá o dando de comer a los dos palmeros de siempre.
La solución sólo pasa por el lleno de restaurantes y tiendas, gente en la calle, vida, movimiento, caja y esto es lo que estos artistas del aburrimiento se han cargado con el argumento fácil y cobarde de la austeridad.
El Pecio era gratis, construir el campo de golf con la iniciativa privada también, hablar con el grupo Fuertes interesado en el Parque Acuático, el coste de la gasolina de aquí a Murcia, la universidad católica, cero euros, ampliar chiringuitos, mantener las terrazas, flexibilizar horarios, nada de nada.
Austeridad en promoción económica es el argumento del negado, la excusa del que no sabe ni aprende, del vago y del aburrido, del que ni tiene ilusión, ni ilusiona, en resumen del incapaz. Lo vaticinado, que salió de la reunión, ruta verda, ruta dels Borja, (que era uno de los muchos proyectos del PP), potenciación del Palau, otra vez control de calidad, más de lo mismo, marear y liar para al final ni decir ni hacer nada.
Lo que he dicho siempre, mucha cultureta y poca playa, mucho mantel y poco bañador estos son los amigos de lo sencillo, pero con buen sueldo, del teatro a poder ser en catalán y de la lectura de ediciones extrañas, estos más aburridos que bailar con un hermano son los que nos ha tocado padecer gracias a la interesada decisión, repito, a la interesada y cobarde decisión del señor Ciro Palmer.
