El Ayuntamiento de Bellreguard, emulando al de la Font d'en Carròs, ha decidido aprobar la creación de un «Consell de Xiquets i Xiquetes». Se trata de un órgano de participación del que formarán parte un grupo de niños del municipio para, por una parte, que aporten su propia visión sobre los asuntos que conciernen al municipio y, por otra, como herramienta pedagógica, educar a los niños en la responsabilidad democrática.
Este órgano está incluido en el nuevo reglamento de participación ciudadana, un documento aprobado por unanimidad en el último pleno del municipio. La creación del «Consell de Xiquets i Xiquetes» fue una de las treinta enmiendas que se presentaron al reglamento durante los sesenta días de exposición al público. Esta, en concreto, estuvo formulada por l'Ateneu Pop0ular Bellreguard-La Roda. Todas las enmiendas fueron aceptadas por unanimidad de los grupos municipales.
A partir de ahora será el pleno el que tenga que concretar las funciones y funcionamiento del «Consell de Xiquets i Xiquetes». En todo caso, indicaron desde el Gobierno local, este quedará adscrito al sector educativo.
Así, el Ayuntamiento tendrá que fijar los requisitos para la elección de los niños que formarán parte de este consejo.
La idea sigue la línea que inició el Ayuntamiento de la Font, que, tras una idea de su alcalde, el socialista Pablo Puig, constituyó hace tres meses el «Consell d'Infants», que, este caso, está formado por 18 niños y niñas de quinto y sexto de primaria que, previamente, llevaron a cabo un proceso de selección entre sus compañeros de colegio.
Para Àlex Ruiz, concejal de Participación Ciudadana de Bellreguard, de Compromís, el recientemente aprobado «es un reglamento valiente y supone un paso firme hacia la democracia participativa». Incide, además, en que «la única manera de acercar la política a los ciudadanos es que decidan en aquello que les afecta directamente».
El reglamento prevé la redacción de un Plan de Acción Municipal con las competencias del Consell de Participació Ciutadana, la elaboración de presupuestos participativos, así como la posibilidad de incorporar políticas concretas a petición de los propios ciudadanos. De hecho, el reglamento regula la participación de los vecinos en el pleno. Además de intervenir libremente en el turno de ruegos y preguntas podrán plantear temas a tratar. Finalmente, se contempla la realización de consultas ciudadanas.
