El departamento de Territorio del Ayuntamiento de Gandia encargado del mantenimiento de las zonas verdes de la ciudad está llevando a cabo una revisión de las palmeras plantadas para detectar aquellas cuyos troncos están en mal estado o simplemente se han secado. Estas últimas serán, obviamente, cortadas, pero también se hará lo mismo con los ejemplares repartidos por la ciudad y la playa que presenten un riesgo de desplomarse, especialmente en jornadas de fuerte viento.
Según ha podido saber este periódico, de esa primera revisión se ha informado que en los próximos días serán cortadas dos palmeras de la clase «wasingtonia robusta» que están gravemente afectadas por un virus que las acaba debilitando y, finalmente, las mata. Las palmeras que van a ser abatidas se encuentran en la rotonda situada en la confluencia de la Ronda de l'Anella con la calle Músic Úbeda, cerca de l'Alqueria de Martorell. Los técnicos ha determinado que, a consecuencia del virus, ambos ejemplares corren riesgo de caer.
También se va a cortar una palmera del tipo «phoenix dactyliphera» en la que se ha observado un pronunciado estrechamiento en la parte superior del tronco, lo que supone un peligro en una zona muy concurrida durante el verano.
En Gandia el Gobierno local dio instrucciones para que solo en caso de necesidad se corten árboles, y ha autorizado que en estos tres casos se proceda a esa solución. De la revisión de palmeras se determinará si otras corren el mismo camino.
Varios ayuntamientos de la Safor han llevado a cabo inspecciones de este tipo de plantas, que han proliferado en las últimas décadas como elemento decorativo, visto el riesgo que presentan cuando los troncos se estrechan o se pudren.
En Tavernes de la Valldigna el pasado otoño varios ejemplares fueron cortados, en la ciudad y en la playa, precisamente para eliminar riesgos. Durante el verano pasado en esta ciudad una palmera destrozó una furgoneta estacionada en la avenida de les Germanies, y en la playa otra palmera cayó sobre una pasarela cuando afortunadamente, nadie pasaba por allí en ese momento.
