La sobrina y otros familiares de una mujer de 83 años residente en una vivienda de la calle Joan XXIII del Grau de Gandia, ayudados por varios clientes de un bar cercano, salvaron la vida de la anciana al conseguir sacarla a tiempo del infierno en que se había convertido el habitáculo.

La mujer, que sufre problemas de movilidad, difícilmente habría podido escapar de ese lugar por sus propios medios, y fue atendida en la misma calle por una ambulancia que, posteriormente, la trasladó a un centro sanitario, donde se le diagnosticaron quemaduras leves en varias partes del cuerpo, según informaron el Centro de Emergencias de la Generalitat y de la Policía Local de Gandia.

El suceso ocurrió poco antes de las dos de la tarde de ayer en esta concurrida zona del Grau. Aunque las causas exactas se están investigando, todo apunta a que el incendio en esta planta baja se originó en una estufa eléctrica que prendió elementos del salón.

Las llamas se propagaron por la estancia, y fue entonces cuando, alertados por lo sucedido, acudieron varias personas, entre ellos clientes de un bar y familiares de la mujer que residen en otra vivienda a escasa distancia de la que se incendió. Varios de ellos entraron en la planta baja y sacaron rápidamente a la mujer, que estaba sola y que ya había quedado envuelta en una nube de humo. Afortunadamente la víctima no perdió la conciencia y fue atendida en el hospital, donde quedó en observación.

En el lugar de los hechos varias personas sufrieron ataques de ansiedad, y además de la herida con quemaduras leves, otras cinco personas fueron atendidas en el centro de salud del Grau por inhalación de humo, aunque, según diversas fuentes, en ningún caso hay que lamentar lesiones graves. Los atendidos son tres mujeres y dos hombres con edades comprendidas entre los 30 y los 60 años. Además de varias patrullas de la Policía Local, muchos vecinos también se concentraron y se ofrecieron para ayudar.

Muebles carbonizados

Según informaron fuentes de los Bomberos de Gandia, de la estufa eléctrica las llamas pasaron a un sofá y a un mueble situados en el mismo salón, afectando, por el denso humo, a prácticamente toda la vivienda.

Unidades de Bomberos del Parque Comarcal de Gandia acudieron al lugar, cuando la mujer ya había sido rescatada, y procedieron a sofocar las llamas. De momento la casa ha quedado cerrada y a primera hora de la tarde de ayer los muebles carbonizados habían sido sacados a la calle a la espera de ser retirados.

Las autoridades advierten constantemente de la necesidad de controlar siempre los aparatos susceptibles de provocar un incendio, especialmente las estufas, que están en el origen de muchos de estos siniestros.