La Dirección General de Tráfico tenía censadas al cierre de 2014 un total de 15.545 motocicletas en la Safor. De estas, un 29 % circulaban por las calles de los municipios de la comarca sin haber pasado la pertinente inspección técnica, es decir, la ITV.
Los vehículos de dos ruedas, como los coches, están obligados, por ley, a someterse a estas revisiones a partir del cuarto año de antigüedad y con una periodicidad posterior de dos años.
Sin embargo, un total de 4.515 motocicletas de una cilindrada superior a los 125 centímetros cúbicos recorren las calles sin haber sido revisadas por los técnicos o bien con el certificado caducado.
Esta situación, además de un peligro para la integridad del conductor, en tanto que un fallo mecánico no detectado podría incluso causar un accidente grave, podría acarrear una importante sanción económica que oscila entre los 200 y los 500 euros dependiendo de si ha caducado la revisión, si no la ha pasado cuando debía o si, por el contrario, sí ha sido sometida a inspección pero no cumple los requisitos técnicos que la hacen apta para la circulación. Si bien, ninguno de los casos acarrea pérdida de puntos del carnet de conducción.
Una de las causas detrás de este «olvido» a la hora de someter a revisión el vehículo es la crisis. La inspección tiene un coste de más de 60 euros. Eso, unido a las apreturas que sufren muchas familias en las que solo trabaja un miembro de la familia, por ejemplo, o que los ingresos son bajos hace que muchos opten por ir dejar pasando el tiempo mientras no sean detectados por la Policía Local. De ahí que en los últimos años se haya disparado tanto el incumplimiento de la ITV como el hecho de que muchos conductores tengan sus seguros caducados.
En porcentaje, en la comarca de la Safor es Simat de la Valldigna el municipio con más «insumisos» de la ITV con un 37 % de conductores. En esta localidad hay censadas, según la DGT, un total de 345 motocicletas, de las que 127 no habrían sido sometidas a revisión. Le siguen Villalonga y Barx con un 36 % y Xeraco, con un 31 % de vehículos de dos ruedas que no han pasado la obligatoria inspección técnica.
Ya en el cuarto escalón está la capital comarcal, Gandia, donde un 30 % de las 7.071 motos censadas circulan sin ITV o con ella caducada, lo que en números absolutos significa que 2.121 usuarios que incumplen la ley.
En el extremo contrario, entre los municipios con un porcentaje inferior de infractores, además de Castellonet, que no tiene ninguno pero cuyo volumen de vehículos es muy poco representativo (14 motos), están Almoines con un 21 % (62 de 296), Beniarjó. y Ador con un 25 %, Bellreguard con un 24 % (90 sin ITV por 379 vehículos) y Daimús y Tavernes de la Valldigna, ambos con un 26 % de motocicletas que no han pasado la pertinente revisión.
Más cuidado con los coches
Las cifras recogidas por la DGT revelan que los conductores son más perezosos a la hora de pasar la ITV de las motocicletas. Así, el porcentaje de coches que no han sido sometidos a revisión está entorno al 13 % de media, una cifra muy inferior a la de sus hermanas de dos ruedas.
