Agentes de la Policía Nacional han desmantelado dos naves industriales utilizadas como invernadero en las que han intervenido 900 plantas de marihuana y, en la misma operación, han detenido a tres personas de entre 33 y 41 años, todos ellos de nacionalidad polaca, en las localidades de Xeresa y Miramar.
Según informó ayer la Jefatura de la Policía Nacional, tras varias comprobaciones los agentes realizaron las entradas y registros en las naves industriales y descubrieron un entramado tecnológico de alta tecnificación y con gran inversión monetaria para el cultivo acelerado de marihuana.
Entre las dos naves se han intervenido 900 plantas de cannabis con un peso que supera los 144 kilos, 900 gramos de cogollos de marihuana, 30 gramos de hachís, así como todos los elementos necesarios para el cultivo, como armarios aislantes, humidificadores, lámparas, filtros de aire y bombonas de gas, además de 300 euros en efectivo.
Asimismo, entre los efectos intervenidos se ha localizado un informe de un ingeniero-técnico agrícola sobre la viabilidad y forma de optimización de una plantación de marihuana en invernadero que fue utilizado por los arrestados para acelerar la producción y lograr así más ganancias ilícitas.
Las investigaciones iniciaron al tener conocimiento de que en Miramar podría haber cultivo de marihuana debido al fuerte olor que desprendía la nave donde se encontraron los invernaderos. Una vez descubierta esta factoría, los agentes averiguaron que los responsables controlaban otra nave en el polígono de Xeresa.
En relación a estos hechos, los investigadores detuvieron a tres hombres de entre 33 y 41 años, que han pasado a disposición del juez, quien decretó el ingreso en prisión de uno de ellos.
De entre estos detenidos se encuentra una de las personas responsable de la asociación que ha abierto un club de fumadores en el paseo de les Germanies de Gandia. Ese local, en el que se puede consumir marihuana, ha cerrado sus puertas momentáneamente a causa de esta operación policial.
Algunos vecinos del edificio rechazan ese local en la planta baja. Ayer el PP volvió a pedir que se cierre por considerar que se trata de un establecimiento que tolera actividades ilegales, y el Gobierno local indicó que consultará a la Policía porque hasta ahora todos los informes técnicos son favorables a la apertura.
