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La emigración que unió dos pueblos

Las respectivas asociaciones de mujeres de Bellreguad y El Provencio impulsan desde el año pasado intercambios entre ambas localidades para reencontrarse y conocer la gastronomía típica Cerca de 70 manchegas y 18 músicos visitaron ayer Bellreguard para una jornada de hermandad

La emigración que unió dos pueblos

Josefa (64 años), de Bellreguard, se reencontró ayer con sus primas por parte de madre, Valentina y Memoria, llegadas del Provencio, una localidad manchega situada en la provincia de Cuenca, entre La Roda y Las Pedroñeras. Se suelen ver con frecuencia, pero ayer lo hicieron por un motivo especial; una visita organizada por la asociación de mujeres del Provencio. Allí nació Josefa y otra veintena de familias que fueron llegando a Bellreguard a principios de los años sesenta del siglo pasado para buscar mejores oportunidades laborales.

Los padres de Josefa, Francisca y Eusebio, fueron de los primeros provencianos en llegar a Bellreguard. Como sus paisanos, trabajaron con ahínco en la naranja o en la construcción con la idea de hacer fortuna y ofrecer a sus hijos algo mejor que las duras labores del campo, la única salida en aquella época en La Mancha.

También fue un día de reencuentros para Anabella, del Provencio. Saludó a las dos primas políticas que tiene en Bellreguard, Arsenia y Pilar, casadas, por cierto, con dos manchegos que también emigraron y conocieron aquí. Anabella no reside en El Provencio; hace 36 años que se marchó con su marido a Madrid también por los mismos motivos económicos, por lo que ayer vio a muchas amigas de la infancia que se mudaron a Bellreguard.

En total, la expedición manchega estaba formada por 63 mujeres, más una veintena de jóvenes músicos que forman la charanga «El Provencio Menudo Subidón». Llegaron en dos autobuses a la Casa de la Cultura, donde fueron recibidos por las autoridades municipales. A mediodía, en el trinquete municipal y tras los saludos protocolarios de rigor, las manchegas se remangaron se pusieron manos a la obra para cocinar platos típicos, todo bajo la atenta mirada en las gradas de sus compañeras, de aquí y de allí.

Además, micrófono en mano, fueron narrando la receta de los platos que elaboraban, como el ajoarriero, las gachas, la caldereta de cordero o el gazpacho manchego. También las «langostas», unas finas lonchas de patata a la plancha con vinagreta, un condimento que según aseguran, es el secreto mejor guardado del Provencio, como la fórmula de la Cocacola. Tras ello hubo una comida en la Llar del Jubilat. La velada finalizó con la actuación de la charanga, y tras ello, despedida y tres horas de autobús.

La idea de este peculiar «hermanamiento» surgió hace un año de las dos presidentas de las respectivas asociaciones de amas de casa, que además son amigas: Geno López, de Bellreguard, y Ángeles Gracia, natural del Provencio, ambas de 55 años.

Geno también tiene sus orígenes en El Provencio. Sus padres llegaron a Bellreguard en 1963 cuando ella tenía dos años. Tiene un hermano nacido en el Provencio y otra hermana que ya nació en Bellreguard. Además es abuela, con lo que, como muchas otras familias de origen manchego, ya son al menos tres las generaciones nacidas en tierras valencianas.

Actualmente, la integración es tal -Geno, por ejemplo, habla perfectamente el valenciano- que muchos bellreguardenses autóctonos desconocen el pasado manchego de sus convecinos y este fenómeno de emigración hacia «El Provencio valenciano», sobrenombre con el que conocían los manchegos a Bellreguard.

El primer viaje fue el 7 de marzo de 2015, por parte de la Associació de Dones de Bellreguard. «Nos hicieron un recibimiento por todo lo alto», recuerda Geno, emocionada. Después, algunas mujeres del Provencio devolvieron la visita en septiembre, para contemplar la Entrada Mora.

En aquella visita al Provencio también se volcó el ayuntamiento, presidido entonces por la socialista Manuela Galiano, que estuvo 12 años al frente del Consistorio, entre 2003 y 2015. Actualmente Galiano es senadora por Cuenca y secretaria de Pequeños Municipios de la Ejecutiva Federal del PSOE. Desde junio de 2015 el alcalde es el popular Julián Barchín, ya que el PP ganó las municipales de mayo con seis concejales frente a los cinco del PSOE.

Implicar a más asociaciones

El Ayuntamiento de Bellreguard quiere estrechar los lazos con El Provencio. La plaza donde se construye la Casa de la Música lleva el nombre del municipio conquense desde la reparcelación del sector, en la legislatura 2007-2011.

Todavía es pronto para valorar si convendría impulsar oficialmente un hermanamiento, como el que Bellreguard tiene con Bazzano, en Italia, pero lo cierto es que las mujeres de ambas localidades han abierto una importante vía.

Precisamente el alcalde de Bellreguard, Joan Marco, y la concejala de Políticas Inclusivas, Dora Salavert, animaron ayer a que este tipo de intercambios con El Provencio se hagan extensivos a otras asociaciones del pueblo, como las deportivas, lúdicas o culturales.

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