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«Es un honor, pero el premio se lo merecen muchos más compañeros»

La ONCE selecciona al vendedor de cupones del hospital de Gandia como el mejor de la Comunitat Valenciana José Antonio Solves reconoce que cuando estaba en la ciudad tenía más clientela

«Es un honor, pero el premio se lo merecen muchos más compañeros»

«Para mí es una alegría y un honor, pero creo que este premio también se lo merecen muchos compañeros de la ONCE». Quien así habla es José Antonio Solves, de 49 años, casado y con dos hijos, que desde hace años vende cupones a las puertas del hospital de Gandia. Primero estuvo en el viejo edificio y hace un año, cuando abrió el nuevo, se trasladó al polígono de Sanxo Llop.

Solves acaba de ser seleccionado como el mejor vendedor de la ONCE de la Comunitat Valenciana en el año 2015. El reconocimiento no es solo por cumplir con un volumen aceptable de venta de los cupones y otros productos de azar, sino también por su implicación en las acciones sociales y culturales de este organismo. En Solves han visto las cualidades de «cercanía, simpatía, solidaridad, ilusión, voluntad, ingenio y compromiso».

Junto a los otros veintiún vendedores seleccionados de todos los puntos de España, Solves recibió el galardón en una cena de gala celebrada en Madrid en la que estuvieron acompañados por los máximos responsables de la Organización, entre ellos el presidente, Miguel Carballeda, y el director general, Ángel Sánchez.

Ayer, apostado como cada día ante la puerta principal del hospital gandiense, Solves, a quien se añade su aspecto bonachón, muestra su «buen trato» con las personas que a diario entran y salen del edificio, pero insiste en que, pese a sentirse «afortunado y honrado», el galardón podría haber ido a otras muchas personas «que también tienen un alto grado de implicación» en las actividades de la organización y que merecen ese título de «buena gente ONCE».

Aunque su punto de venta esté situado en un lugar de gran afluencia de personas, para José Antonio era aún mejor el viejo hospital de Gandia, situado en pleno casco urbano de la ciudad, porque, según narra, allí «contaba no solo con quienes iban al hospital, sino también con los vecinos del barrio y los gandienses en general».

Como tantos otros, también él ha notado el paulatino descenso en las ventas de cupones, debido de la crisis, pero se aferra a la estadística que sitúa un ligero incremento del 2 % en el número de cupones expedidos en 2015.

De sus clientes, la mayoría trabajadores del hospital, usuarios, familiares y visitantes del centro sanitario, José Antonio indica que hay quienes, al dirigirse a él para adquirir el cupón, «se nota que lo hacen atraídos por la labor social» de la ONCE. «Pero también los hay quienes piensan exclusivamente en el dinero», concluye quien ostentará durante un año el título de mejor vendedor de la Comunitat Valenciana. Al despedirse, insiste en trasladar el honor a quienes, como él, hacen de «buenos» en la organización nacional de ciegos.

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