La manada formada por una decena de perros que la pasada semana atacó a un caballo en la zona residencial del Pla de Corrals, en el término de Simat de la Valldigna, también ha amenazado e incluso herido a personas y ha causado estragos a otros animales.
Según ha podido saber este periódico, los perros, de distintas razas y tamaños, están actuando como una jauría que causa temor entre muchos de los residentes del Pla de Corrals. Hace quince días un hombre de Alzira que tiene una residencia de verano en este lugar fue mordido por al menos uno de los canes. Aunque las heridas de revestían gravedad, decidió presentar una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Tavernes de la Valldigna para que actúe.
Poco antes el propietario de una granja situada en el término de Barxeta también denunció a la Guardia Civil de esa localidad que estos mismos perros entraron en su parcela y mataron a algunos de sus animales.
La última diablura de esta manada incontrolada fue el ataque al caballo rescatado por la Guardia Civil, al que le arrancaron una oreja y al que dejaron malherido e inmovilizado entre un muro y un barranco. De no haber sido localizado por su propietario, el animal habría muerto.
Hartazgo de los vecinos
En el Pla de Corrals los vecinos están hartos de tener que soportar esta situación a la que las autoridades hasta ahora no han podido ponerle coto. Y no será por no intentarlo porque, según señala el alcalde de Simat de la Valldigna, Víctor Mansanet, la Policía Local ya lleva una decena de denuncias contra el supuesto propietario de los canes. Supuesto porque al menos la mayoría de los animales, que deambulan sin collar, carecería de registro sanitario ni tarjeta de identificación. Cuando no están sueltos, la manada se refugia en el patio de un hombre domiciliado en Alzira, donde los alimenta, pero hasta el momento no se ha podido conseguir una autorización para intervenirle la manada, dado que el hombre impide que la policía acceda a su propiedad para una inspección.
De las diez denuncias que se le han impuesto, no ha pagado ni una, señaló ayer el alcalde simatero, quien añade que ya se han dado instrucciones para que sigan su curso y se proceda al cobro de las sanciones por vía ejecutiva. Eso al margen de las posibles responsabilidades de otro tipo en que pudiera incurrir el dueño por los daños causados al hombre al que mordieron, por el caballo herido y por su intrusión en la granja de Barxeta.
Mientras se actúa en esas vías, el Ayuntamiento de Simat de la Valldigna está a apunto de firmar un convenio con la Sociedad Protectora de Animales y Medio Ambiente de la Safor (Spama), que permitiría recoger los perros de la calle sin que el propietario pudiese evitarlo, dado que carecen del chip de identificación y de registro sanitario. De allí se llevarían al albergue que la Spama tiene en Gandia.
