Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado martes en Gandia a un hombre de 56 años, de origen español, como presunto autor de los delitos de lesiones y amenazas con arma blanca en una extraña agresión que desconcertó a los agentes.
Como contó este periódico en su día, el suceso ocurrió el domingo 10 de abril en la calle dels Reis Catòlics, junto al parque de la avenida de les Esclaves. El hombre detenido, tras abordar a la mujer, la golpeó en reiteradas ocasiones y la amenazó con una navaja que llegó a clavarle levemente en el cuello y en la pierna. La víctima fue atendida por los servicios sanitarios que optaron por trasladarla al hospital de Gandia.
Según cuenta la Policía Nacional, el hombre, al agredir a la mujer, le hizo entrega de una gorra de color rojo, un gesto que se está investigando para determinar exactamente los motivos de la agresión, dado que el móvil aún no está del todo claro.
Las investigaciones se iniciaron al tener conocimiento los policías que una mujer había sido abordada por un hombre mientras caminaba por el parque de Gandia y que le había propinado patadas y puñetazos por todo el cuerpo.
Durante las investigaciones, los agentes averiguaron que la mujer había tratado de zafarse del sospechoso, no consiguiéndolo, y éste le había propinado un rodillazo en la espalda que la hizo caer. Cuando trataba de incorporarse, observó cómo el agresor llevaba en la mano una navaja, por lo que trató de huir nuevamente, sin lograrlo. El sospechoso la cogió y la apuñaló levemente en el cuello y en la pierna izquierda, ocasionándole cortes que, afortunadamente, no resultaron graves.
Víctima y sospechoso forcejearon de nuevo y en esta ocasión le propinó un golpe en la rodilla. La víctima trató de solicitar ayuda y en el momento en que el sospechoso se percató emprendió la huida en un coche donde había otra persona esperándolo.
Continuando con las investigaciones, los agentes averiguaron que hasta el lugar había acudido una patrulla de Policía Local, que había atendido a la mujer con las heridas, por lo que solicitaron asistencia sanitaria, que tras una valoración fue trasladada a un hospital de Gandia. También vecinos de la zona colaboraron explicando lo que habían visto.
Como consecuencia de las investigaciones, los agentes averiguaron la identidad del sospechoso y, tras su localización, fue detenido como presunto autor de los delitos de lesiones y amenazas con arma blanca.
Tras instruir las diligencias y pasar a disposición judicial, el hombre ha quedado en libertad con cargos y el juez le ha impuesto una orden de alejamiento de le víctima de tres meses, algo que la Policía controlará para evitar que pueda producirse una nueva agresión.
