El alcalde de Simat de la Valldigna, Víctor Mansanet, de EU, no ocultó ayer, en declaraciones a este periódico, su «despago» por la escasa respuesta que ha tenido entre los vecinos la llamada realizada para que, entre todos, decidieran en qué se invertían 120.000 euros que el Plan de Obras de la Diputación de Valencia asigna a este municipio.
Pese a que durante varios días se hicieron bandos y se anunció a través del wasap institucional, del facebook y de la web del ayuntamiento, apenas seis personas acudieron a la cita del viernes de la semana pasada. De esas, cinco tenían vinculación con los grupos políticos municipales. El resultado de la convocatoria es que no se ha podido determinar el destino de los 120.000 euros.
El alcalde Mansanet reconoció ayer el fracaso de la iniciativa de hacer partícipes a los vecinos de una parte de la gestión municipal, pero añadió que, pese a todo, ni él ni su equipo de gobierno renuncian a seguir intentando que los ciudadanos expresen su criterio. «Si no lo hemos logrado ahora, usaremos otro procedimiento», indica.
Así, se ha prolongado hasta el próximo 10 de mayo el periodo para poder opinar sobre los 120.000 euros. Pero en esta ocasión se hará de forma telemática, fundamentalmente a través de un enlace que se abrirá en la página web del ayuntamiento. «Queremos que las personas participen», añadió la primera autoridad local, quien expresó que, en parte, ese desapego de los ciudadanos en la gestión del dinero público se puede deber a los muchos años que han pasado sin que puedan hacerlo.
Aun así, el Gobierno de Simat sí que ha decidido en qué invertir una parte de esos 120.000 euros después de que, espontáneamente, se haya producido un proceso de participación ciudadana, dado que un vecino presentó al ayuntamiento un escrito avalado por 54 firmas que solicitaba el asfaltado y la mejora de la calle de Sanchis Guarner, donde se encuentra el tanatorio. «Lo haremos y, además, mejoraremos las redes de abastecimiento de agua potable y de evacuación de residuales», señala Mansanet, que aplaudió la iniciativa de los vecinos que recogieron las firmas.
Casos similares en Tavernes
La participación ciudadana, un concepto que se ha puesto de moda en la política local especialmente tras las últimas elecciones municipales, también ha tenido pinchazos en otros pueblos de la Safor.
Muy cerca está el caso de Tavernes de la Valldigna, donde el referéndum realizado a través de internet para determinar aspectos de las fiestas locales, incluidos los «bous al carrer», apenas despertó el interés del 11 % del censo.
Más recientemente en esta misma localidad algunos vecinos convocados para decidir si se cerraba al tráfico el centro urbano de la localidad incluso reprocharon a los concejales que les pasaran esa decisión a ellos.
El alcalde, Jordi Juan, también lamentó en aquella ocasión que los ciudadanos «no están acostumbrados a que se les pregunte».
