La carretera nacional 332, en el tramo conocido como las curvas de Sant Joan, en el término de Gandia, registró en la mañana de ayer una nueva tragedia que se cobró la vida de una mujer de 50 años, vecina de Xeraco y madre de una hija.

El suceso ocurrió poco después de las 8 de la mañana, cuando el vehículo en el que viajaba la víctima, que iba sola, circulaba en dirección a Xeraco. Justo en el punto donde finaliza la ronda de Gandia, y antes de incorporarse al tramo de autovía que acaba en Xeresa, el coche, por causas que se desconocen, colisionó frontalmente con un camión que circulaba en sentido Gandia.

El impacto, que testigos presenciales definieron como de una enorme brutalidad, destrozó el vehículo en el que iba la mujer, que ya estaba muerta cuando llegaron las primeras personas a comprobar su estado.

Efectivos de la Guardia Civil de Tráfico acudieron inmediatamente al lugar de los hechos, al igual que un equipo de excarcelación del parque comarcal de bomberos de Gandia, que procedió a las labores para la retirada del cadáver. En ese momento ya se había cortado el tráfico.

La Guardia Civil investiga ahora las causas exactas del accidente, que deberán determinar si fue el coche o el camión el que invadió el carril por el que circulan los vehículos que van en sentido contrario, e incluso si pudieron producirse otros factores.

A consecuencia del accidente, que se produjo en una hora punta de máxima afluencia de tráfico, se procedió a cortar la carretera nacional mientras duraron las labores de atención y de retirada de los vehículos. La Guardia Civil desvió el tráfico por otras vías, lo que no evitó que se produjeran larguísimas colas, de hasta tres kilómetros, especialmente en el sentido de la circulación hacia la ciudad de Gandia.

Aunque el lugar del accidente no es un punto negro, sí es cierto que la curva existente impide ver los vehículos que circulan en dirección contraria.