El Ministerio de Fomento ha acelerado en las últimas semanas el plan de obras para adelantar y terminar cuanto antes el acceso sur al puerto de Gandia, una actuación de 23,4 millones de euros que cambiará significativamente la ordenación del tráfico en la zona sur de los cascos urbanos urbanos de Gandia, del Grau y de la playa.
El delegado del Gobierno de España en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, visitó ayer el restablecimiento del carril bici Gandia-Oliva que, a través de un túnel de 295 metros y un coste de 700.000 euros de inversión, ya permite que los muchos ciclistas y peatones de esta vía verde puedan salvar la futura carretera de acceso al puerto. Hasta ahora tenían que sortear la zona de obras pasando por caminos sin asfaltar, lo que obligaba a las bicicletas con rueda fina a cambiar de itinerario y usar la carretera Nacional-332, con el riesgo que ello conlleva.
Al margen de esa actuación, el responsable de la Demarcación de Carreteras del Estado en Valencia, Ismael Ferrer, anunció ayer importantes novedades respecto al conjunto de la obra denominada acceso sur al puerto de Gandia. Así, lo más probable es que a finales de este mismo año o principios de 2017 pueda estar terminado el primer tramo de esta enorme infraestructura, la que discurre la rotonda de la N-332 de Bellreguard y la zona comercial de la Vital. Ese tramo, diseñado en cuatro carriles, también permitirá mejorar los accesos al hospital y descongestionará la actual entrada sur de Gandia.
Para el segundo tramo, entre la Vital y la carretera Natzaret-Oliva, la previsión es terminarlo a lo largo de 2017 y como principal aspecto presenta una gran rotonda en la confluencia de ambas vías, a la altura de la depuradora comarcal de aguas residuales.
A partir de entonces los esfuerzos se centrarán en el tercer tramo, el más espectacular desde el punto de vista visual e incluso de ingeniería porque contempla un puente sobre la desembocadura del río Serpis. Desde la carretera Natzaret-Oliva hasta el puerto el vial ya no será de cuatro carriles, sino convencional, con un carril en cada sentido de la marcha. Ismael Ferrer indicó que la previsión es que la obra completa haya finalizado dentro de dos años, explicó que, dado que el río Serpis fue declarado Paisaje Protegido por la Generalitat, el diseño del puente ha tenido en cuenta el menor impacto ambiental y visual sobre la zona.
Conexión Marenys-Grau
Ese puente también dará el servicio que desde hace años reclaman los vecinos de Marenys de Rafalcaid, que desde entonces podrán llegar directamente al Grau sin la necesidad del actual rodeo.
El acceso sur al puerto, cuyas obras se iniciaron en 2010 pero que durante mucho tiempo permanecieron paralizadas, va a resultar vital para el Grau, dado que este distrito dejará de sufrir el paso constante de grandes camiones camino de los muelles. Pero es que, además, modificará los accesos en toda la zona.
El delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, definió esta actuación como una «ronda sur» para Gandia. De hecho, desde la rotonda de Bellreguard y desde la playa de Gandia se podrá acceder al nuevo hospital, a la áreas comerciales y a la carretera Natzaret-Oliva, que en verano constituye un eje de circulación vital para llegar a las playas del sur de la comarca.
Además, el puente sobre el Serpis y el resto del recorrido contempla un carril bici, de manera que podrá enlazar con la vía verde Gandia-Oliva, dando continuidad a un gran itinerario por el sur de la comarca.
La mayor obra del Estado
En su conjunto, el acceso sur al puerto de Gandia constituye, en estos momentos, la mayor obra de la Administración del Estado en la comarca de la Safor, y según señalan los responsables políticos, la intención ahora es poder superar las restricciones presupuestarias de años atrás y terminar la obra. Para este año 2016 la consignación de dinero para esta obra alcanza los 6 millones de euros, pero será necesario que el Gobierno canaliza varios millones más el año que viene y el siguiente para concluir esta actuación diseñada en un ya lejano 2009.
Tras recorrer la zona acompañado por técnicos y responsables de Copcisa, la empresa que ejecuta los trabajos, Juan Carlos Moragues mostró su satisfacción por «el gran beneficio para los vecinos de Gandia» que este proyecto contempla, y añadió que «mejorará notablemente las comunicaciones del puerto de Gandia con el exterior ya que se establecerá una conexión directa con la N-332».
En conjunto, el nuevo eje viario discurre en su totalidad por el término municipal de Gandia, con una longitud de 4,2 kilómetros, y ha sido diseñada para unas velocidades máximas de 60 y 80 kilómetros a la hora, según tramos.
