La Policía Nacional ha desarticulado una banda que estaba radicada en Villalonga y Gandia y que, presuntamente, podría estar relacionada con el asalto a chalets en la provincia de Alicante.
En la espectacular operación en la que varios agentes irrumpieron por la fuerza en una casa de Villalonga, han sido detenidas cuatro personas, que se encontraban en el interior de la casa ubicada en la avenida de Blasco Ibáñez.
La banda, presuntamente, asaltaba residencias de verano en varios municipios de la provincia de Alicante. Estos aprovechaban la ausencia de sus inquilinos para llevarse joyas, relojes, dinero o aparatos electrócinos, todos ellos elementos que podían sustraer con facilidad al ser de poco peso y que podrían colocar en el mercado de una forma sencilla.
La investigación que ha acabado con el desmantelamiento de este grupo comenzó el pasado mes de febrero, cuando los agentes recibieron información, por parte de la Agregaduría de Interior de la Embajada de Rumanía en España, de un robo con fuerza en un municipio alicantino.
La Policía pudo identificar a una persona como el responsable de estos hechos y, gracias a ello, al resto de la organización.
Los arrestados elegían aquellas residencias de verano en las que los moradores se encontraban fuera por no ser su domicilio habitual durante todo el año.
Registros también en Gandia
Como resultado de la investigación han sido apresadas cuatro personas y se han practicado cuatro registros varios municipios de Villalonga y Gandia. En ellos, los agentes se han incautado de más de una decena de teléfonos móviles y tabletas, dos ordenadores portátiles y diversos objetos valiosos como relojes, monedas de colección o joyas.
La operación ha sido llevada a cabo por el Grupo de Delitos contra el Patrimonio de la UDEV Central y el Grupo de Estupefacientes y Crimen Organizado de la Brigada Local de Policía Judicial de la Comisaria de Gandia. De los arrestados en la operación, tres han quedado en libertad, mientras que uno ha sido enviado a prisión.
Las residencias de verano son de lo más vulnerable debido a que durante los meses de invierno muchas de ellas están vacías, lo que facilitan el trabajo de los ladrones.
