La concejala Ana García mostró ayer, en declaraciones a este periódico, su satisfacción tras la sentencia que le absuelve de haber cometido irregularidades en el pago de las facturas de UGT que el PP denunció en 2013.
García, concejala de Hacienda entre 2007 y 2011, bajo la alcaldía de José Manuel Orengo, añadió que esa alegría «no es completa» porque «he tenido que soportar durante tres años un proceso por el que he tenido que responder a muchos requerimientos», alterando su vida profesional una vez había dejado el Gobierno local.
«Aunque la sentencia supone la demostración de lo que siempre defendimos, la verdad es que no hay reparación moral por el daño causado. Formalmente se me absuelve y se desestima la causa, pero no se tendría que haber llegado a este punto».
Finalmente, dirigiéndose a los concejales del PP que presentaron la denuncia, García señaló que, conocida la sentencia, «me gustaría que el exalcalde y su grupo, que votaron a favor, se pensaran y repensaran todo lo que han hecho». s. s. gandia
