La alcaldesa de Benirredrà, Loles Cardona, quiso puntualizar ayer el porqué del resultado negativo de la liquidación del presupuesto municipal del ayuntamiento que preside en 2015.

Pese a que los datos del Ministerio de Hacienda recogen un déficit de 126.000 euros al final del ejercicio, Cardona aseguró que esta cifra no refleja la realidad económica del consistorio. Según explicó, en realidad acabó el ejercicio con un superávit de algo más de 73.000 euros, a lo que se le sumó un remanente de tesorería positivo de 216.700.

Parte de ese dinero sobrante, en concreto 194.194 euros, fue utilizado para amortizar la deuda financiera del municipio. Así, Benirredrà, además de cubrir 106.482 euros del vencimiento ordinario de las cuotas trimestrales de los préstamos (lo que le tocaba pagar en 2015), tuvo la opción de llevar a cabo operaciones de 120.000 y 74.194 euros para amortizar créditos, algo que le permite cumplir con la ley de estabilidad presupuestaria de las entidades locales, que reza que cuando se produzca un saldo positivo, ese dinero debe ser utilizado para cubrir deuda.

Estas operaciones, sin embargo, no aparecen reflejadas en la liquidación que ofrece el Ministerio de Hacienda. El hecho de que el pago se realice a cuenta del remanente de tesorería hace que la operación no se compute como ingreso aunque sí que aparece el gasto, de ahí que el saldo sea negativo. En dos años, Benirredrà ha logrado rebajar de la barrera del 75 % la ratio de endeudamiento municipal, según señaló Cardona.