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Los padres de Daimús y la Font votarán si quieren jornada intensiva este curso

Son los dos primeros centros de la Safor que han recibido el visto bueno de la Conselleria de Educación Siete de los ocho colegios de Oliva y el de Beniarjó-Beniflà también lo han solicitado

Los padres y madres de los colegios Mestre Rafael Noguera, de Daimús, y Francesc Carròs, de la Font d'en Carròs, decidirán el próximo mes de septiembre, en votación, si aplican a partir del 1 de octubre la jornada intensiva, que dejaría el horario lectivo entre las 9 de la mañana y las 2 de la tarde. A partir de ese momento los alumnos quedarían libres y solo seguirían en el comedor y en actividades extraescolares vespertinas si libremente lo deciden los padres.

Estos dos colegios son los primeros de la Safor que han recibido el visto bueno de la Generalitat para aplicar la jornada intensiva. En esta primera relación se encuentran setenta centros, la inmensa mayoría de la provincia de Alicante.

En los próximos días la Conselleria de Educación seguirá analizando las propuestas planteadas por otros centros educativos para dejar de hacer clases por la tarde y concentrar todo el horario lectivo en la mañana. Entre esos centros están, como en su día publicó Levante-EMV, siete de los ocho colegios públicos y concertados de Oliva, así como el Sant Marc, al que acuden los niños de Beniarjó y Beniflà.

Según señaló ayer la Generalitat, a lo largo y ancho de la Comunitat Valenciana han sido 329 centros los que que han presentado proyectos solicitando un cambio de jornada escolar, de los que 262 corresponden a la provincia de Alicante, 15 a la de Castellón y 52 a la de Valencia.

La Conselleria de Educación tiene previsto finalizar esta semana el proceso de evaluación de las 122 propuestas que están pendientes analizar, entre ellas las de Oliva y Beniarjó-Beniflà.

El procedimiento se inició con las solicitudes remitidas por los centros a las diferentes direcciones territoriales. Posteriormente, se han realizado los informes de la Inspección que han sido remitidos por la Dirección Territorial, junto a la resto de documentación, a la dirección general de Política Educativa de la Conselleria.

La última palabra la tendrán siempre los padres de cada centro, dado que es necesario que el 60 % de ellos apruebe el cambio de horario y permitan aplicar la jornada intensiva.

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