Después de que el Ayuntamiento de Gandia limara asperezas con la Asociación de Empresarios de Hostelería y Turismo de la Safor (Asemhtsa), formada mayoritariamente por empresarios de Gandia, esas relaciones se han vuelto a distanciar a raíz, entre otros aspectos, de las órdenes del cierre de establecimientos y actividades de la playa que, según los informes técnicos, incumplen alguna norma.

Como adelantó este periódico el pasado miércoles, el consistorio, a la luz de informes que revelan irregularidades o infracciones urbanísticas, ha decretado el cierre de una discoteca, un complejo de ocio y un chillout después de tener constancia de denuncias por parte de los vecinos, aunque los tres previsiblemente permanecerán abiertos lo que queda de verano porque los empresarios pueden presentar alegaciones a la orden de cierre.

Ante esas acciones administrativas y las afirmaciones de la Asociación de Vecinos por la Convivencia, que sigue denunciando exceso de ruido y de vandalismo en la playa, Asemhtsa ha decidido remitir una carta a la alcaldesa y a los grupos políticos municipales en la que asegura sentirse sola en la defensa de los intereses de los empresarios.

«Únicamente tenemos como aliados al sol y a la playa. Y damos gracias por ello», indica la misiva de la asociación que preside José Manuel Navarro. En su opinión, el sector hostelero está sufriendo «ataques» que no entienden. Añade que «se criminaliza» a los locales de ocio y que «la Administración», sin citar nombres, está realizando «continuas manifestaciones desprestigiando al sector y realizando comentarios que en nada favorecen al desarrollo turístico de la ciudad».

Representación que no tiene

Asemhtsa sí nombra a la Asociación de Vecinos por la Convivencia, que pide más medidas contra el ruido, acusándola de «arrogarse una representatividad que no tiene» y de tratar de «criminalizar a los locales de ocio».

Respecto a las recientes órdenes de cierre de los locales por infracciones o irregularidades en su funcionamiento, Asemhtsa critica que eso se haga «en plena temporada turística» y «por razones que no alcanzamos a comprender».

Tras recordar que el turismo es «el motor de nuestra economía» y que crea «el 30% del empleo directo e indirecto de Gandia», la asociación señala que se siente «el sector más vapuleado y con peor imagen de todos», clama para que «dejen de calificarnos como el enemigo de los vecinos y de tratarnos como turismo de borrachera», y concluye preguntándose «quién está de nuestra parte».

Como también publicó Levante-EMV, el anterior enfrentamiento de Asemhtsa con el ayuntamiento fue a costa de la prohibición de instalar carteles con los menús en la acera, pero el diálogo con la concejala de Políticas Económicas, Alícia Izquierdo, permitió reconducir esa situación y alcanzar un acuerdo.