El departamento de Responsabilidad Social del Ayuntamiento de Gandia, en compañía de las asociaciones de la ciudad, han aprovechado el trabajo de elaboración del plan estratégico de subvenciones para crear un nuevo mapa de necesidades en lo que respecta a entidades sociales. Así, según explicó Nahuel González a este periódico, si hay cuatro organismos que se dedican a dar comida, se revisa y se cambia la subvención que recibe uno de ellos para tal efecto y se entrega para otra cosa. Es el caso, por ejemplo de Cáritas. El economato de esta entidad deja de tener ayudas económicas pero, a cambio, el Ayuntamiento le cede a la asociación una vivienda tutelada destinada a la reintegración social de indigentes. Esta estará ligada al programa que el Centre d'Atenció Integral lleva a cabo con los usuarios de esas instalaciones para que dispongan de una nueva oportunidad de volver a tener una vida normalizada. El piso tutelado, que será uno de los que el consistorio gandiense tiene en propiedad, puede ser un paso previo a su independencia total.
t. á. c. gandia
