Los agentes de la Policía Local de Xeraco lograron el pasado domingo reanimar a un anciano de 88 años que había sufrido una parada cardíaca cuando paseaba por la calle. Los hechos ocurrieron en la playa, alrededor de las 11 de la mañana. Un aviso alertaba de que el hombre yacía en el suelo.
Los agentes que se desplazaron hasta el lugar le practicaron varias descargas con el desfibrilador. Minutos más tarde llegó una ambulancia con varios sanitarios que siguieron practicándole maniobras de reanimación.
Finalmente, y tras casi una hora, lograron que el hombre respondiera y volvió en sí. Una vez estabilizado en el lugar, fue cargado a una camilla y trasladado en ambulancia hasta el hospital Francesc de Borja. Aunque ingresó con vida, finalmente, sin embargo, el anciano falleció debido a las heridas que sufrió en la cabeza por culpa de la caída cuando se desmayó.
En todo caso, esta acción viene a demostrar la importancia de disponer de un desfibrilador y, sobre todo, de que los agentes estén preparados para accionarlo, en tanto que puede salvar la vida de una persona.
Según explicaron fuentes conocedoras de los hechos, es la tercera ocasión que la policía de Xeraco ha tenido que hacer uso de este aparato, del que ya disponen casi todas las policías y que está instalado en muchos lugares públicos como ayuntamientos, centros comerciales u otros. Algunas voces reclaman, incluso, que sea obligatorio instalarlo en comunidades de propietarios.
