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GANDIA Desbloqueo del proyecto

El PAI de Ocio de la playa arrancará este mismo año

El anterior Gobierno adjudicó el proyecto hace casi dos años, pero no se podía ejecutar porque faltaba el plan para evitar la contaminación del marjal. Una UTE formada por cuatro empresas tiene previsto iniciar las obras antes de que acabe el año

Si las previsiones del Gobierno de Gandia se cumplen, la próxima semana el responsable de Urbanismo, Vicent Mascarell, firmará el acta de inicio de las obras de urbanización del llamado Sector de Equipamientos Privados de la playa de Gandia, más conocido como la zona de comercios y de ocio, cuyos trámites se han prolongado durante más diez años y han abarcado tres corporaciones locales diferentes.

Los trabajos para acondicionar todo ese espacio, que alcanza una superficie de 174.000 metros cuadrados entre la antigua discoteca Island y el autocine Lluna Park, a lo largo de la carretera Natzaret-Oliva, están valorados en 8,5 millones de euros, y la actuación fue adjudicada en marzo de 2015, hace casi dos años, por el anterior Gobierno local del PP. Los trabajos se entregaron a la UTE formada por cuatro empresas: Asfaltos y Construcciones Elsa, Constructor, Cadersa y Cyca.

El problema es que, cuando se debían iniciar las obras, los técnicos municipales advirtieron de que el proyecto carecía de un aspecto fundamental, dado que no se había previsto un depósito de recogida de aguas pluviales y, en consecuencia, ese caudal, que arrastra sustancias contaminantes del suelo, habría ido a parar directamente al marjal, un espacio natural protegido.

Para evitarlo y poder iniciar las obras, el Gobierno gandiense aprobó hace unos días la construcción de un depósito con capacidad para 8.000 metros cúbicos bajo el parque del Clot de la Mota que permitirá enviar las aguas pluviales contaminadas hasta la depuradora. Esa instalación, que también evitará inundaciones en un área importante de la trama urbana de la playa, se ejecutará en esta legislatura, de manera que el sector de ocio se podrá dar por acabado y se podrán conceder licencias de obras para negocios.

El Sector de Equipamientos Privados de la playa de Gandia puede considerarse como la última gran urbanización pendiente en la franja litoral de la ciudad. Cuando se concibió este proyecto se optó por impedir que allí pudiesen construirse viviendas. La idea fue justamente la contraria porque el ayuntamiento espera que la apertura de los solares permita que los propietarios de locales de ocio, especialmente discotecas y pubs, se trasladen allí. Actualmente muchos de ellos están metidos en áreas residenciales de la playa, o muy cerca de ella, y son constante fuente de conflicto con los vecinos.

Un diseño también ambiental

Además de pensar en trasladar actividades molestas a esa zona, los técnicos municipales que redactaron el proyecto llevaron a cabo, a propuesta de la Generalitat Valenciana, una modificación para ampliar la franja de terreno que se deja libre de construcciones junto al marjal. Allí se habitará un paseo de ocho metros de anchura junto al espacio natural protegido.

En la vertiente económica, muchos propietarios de grandes parcelas en esa zona esperan con ansia la urbanización, pero otros, especialmente pequeños propietarios, critican el elevado coste de la obra frente a las presumiblemente bajas expectativas de vender los futuros solares. El ayuntamiento confía en la ubicación «estratégica» de esa zona, junto toda la playa, para que sirva de aliciente a la inversión.

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