Una delegación política de la Safor, formada por la alcaldesa de Gandia, concejales de esta ciudad, de Bellreguard y de Ròtova, han tenido la ocasión de conocer en primera persona la situación en la que viven miles de ciudadanos saharauis en los campos de refugiados de Tinduf, en el árido el desierto de Argelia. Su situación política, en permanente conflicto con el Reino de Marruecos, les mantiene fuera del territorio que fue la última colonia española.
El viaje, en el que participaron Diana Morant, Nahuel González, Lydia Morant, Dora Salavert y Ángela Pla, entre otras personas, fue organizado por la Associació Comarcal d'Ajuda al Poble Saharauí de la Safor (Acaps), presidia por Salvador Pallarés, después de que el verano pasado, en el marco de la última campaña de acogida «Vacances en Pau», detectó un interés de algunos concejales por conocer el contexto en el que viven esos niños y sus familias en medio del desierto argelino.
La delegación comarcal visitó los poblados, los hospitales y otras instalaciones, algunas de las cuales han sido financiadas y sostenidas gracias a la solidaridad de ciudadanos y asociaciones españolas. También mantuvieron contactos con los ministros de la República Árabe Saharaui Democrática, que exige el retorno al territorio que ocuparon, actualmente bajo dominio marroquí.
A su regreso, Acaps ha agradecido que los componentes del grupo «se decidieran a viajar en unas fechas tan señaladas y especiales para nuestra cultura», en plena Navidad, razón por la que el viaje se redujo a solo tres días, «suficientes para cumplir con nuestros objetivos», indica la asociación solidaria con el pueblo saharaui.
No es el primer viaje de estas características que se organiza desde la Safor, dado que en el pasado también grupos de políticos y ciudadanos interesados en conocer la realidad de los campos de refugiados estuvieron compartiendo jornadas con aquellas personas que viven en un auténtico limbo jurídico por el conflicto territorial con Marruecos, fruto, según su criterio, de la pésima gestión que llevó a cabo el Gobierno de España en el proceso de descolonización realizado a mediados de la década de los setenta del siglo pasado.
Con estos viajes a Tinduf, Acaps pretende sensibilizar sobre esta situación y también transmitir a la población refugiada la existencia de un marco de solidaridad «que tiene presente su situación y trabaja para que se resuelva desde una doble vertiente, la personal y la institucional».
«En este viaje se han establecido contactos, se han creado sinergias, personales e institucionales. Nuestros representantes políticos han podido conocer de primera mano la realidad de la población refugiada saharaui. De hecho la han vivido por tres días, porque las cosas no se ven igual que si se viven», señala Acaps.
La Safor es, cada verano, una de las comarcas acogedoras de niños y niñas saharauis que pasan sus «Vacances en Pau» en viviendas de familias hospitalarias y solidarias. En esas estancias, gracias a un acuerdo del Gobierno de España, los menores que necesitan asistencia sanitaria de algún tipo acuden a los médicos, centros de salud u hospitales públicos para que sean atendidos.
