La Conselleria de Economía Sostenible que dirige Rafael Climent va a tener que esforzarse para repartir sin agravios comparativos los 2,2 millones de euros que ha prometido para la mejora de los polígonos industriales de la Safor que presentan deficiencias.
Esa línea de ayudas dirigida a incrementar el atractivo de zonas industriales que ahora no presentan los servicios necesarios que precisan las empresas ya ha quedado desbordada por la enorme superficie urbana de la que disponen los ayuntamientos que no reúne las condiciones necesarias para permitir la implantación de empresas competitivas y, especialmente aquellas que precisan de las nuevas tecnologías.
Gandia, el Real de Gandia, Ador, Ròtova, Benifairó de la Valldigna, Daimús, Oliva, Xeraco y otros gobiernos locales ya han planteado a la Generalitat acogerse al programa de subvenciones que se canalizará a través del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial.
Inicialmente el departamento del conseller Rafael Climent planteó esta línea de ayudas económicas para dirigirlas a aquellas zonas industriales que carecen de servicios básicos, no están adaptados para acoger empresas que requieren una ampla competencia tecnológica, e incluso con obras de urbanización sin terminar. Pero los ayuntamientos, como era previsible, aprovechan cualquier disponibilidad de dinero para solicitar su parte, de ahí que casi todos los municipios que disponen de áreas industriales se hayan querido acoger para mejorar los servicios a las empresas que ya están en sus polígonos o favorecer que se implanten nuevas.
La pasada semana la concejalía de Polígonos de Oliva, que dirige Blai Peiró, aprobó la solicitud para invertir en el polígono del Brosquil a través de esta línea de subvenciones.
Según informa el ayuntamiento, el plan contempla la instalación de fibra óptica en todo el polígono, la colocación de cámaras de seguridad conectadas a una central, aplicar alumbrado led, mejorar el ajardinamiento y barreras vegetales, situar nueva señalización horizontal y vertical, actualizar los sistemas de alcantarillado y recogida de aguas pluviales y crear una página web con toda la información de las empresas del polígono.
Párking de camiones
El Ayuntamiento de Oliva también tiene especial interés en incluir la ayuda para la construcción del párking de camiones en el mismo polígono después de haberlo retirado del casco urbano. El conjunto de estas actuaciones suman un total de 350.000 euros, de los que se intenta que la Generalitat pueda subvencionar en su mayor parte.
El concejal Blai Peiró señaló que el proyecto que se ha aprobado para la mejora del polígono del Brosquil «es ambicioso y se considera prioritario para la delegación y el equipo de gobierno olivense, dado que ayudará a impulsar a las empresas instaladas y contribuirá a la mejora del dinamismo empresarial y económico de nuestra ciudad».
