Han tenido que pasar décadas, pero el histórico anhelo de la ciudad de Oliva para que su casco urbano deje de soportar el paso de centenares de vehículos pesados está cada vez más cerca que cumplirse. El alcalde de Oliva, David González, recibió ayer en su despacho del Ayuntamiento al delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, quien le llevaba buenas noticias. El Ministerio de Fomento ha aprobado, a través de la Dirección General de Carreteras, el proyecto de trazado de la conexión de la N-332 al sur de Oliva con la AP-7.

Este proyecto no solo permitirá dar un respiro de tráfico a los vecinos, sino que también mejorará los accesos a los polígonos del sur de la ciudad como el de Jovades y el Brosquil, otra histórica reivindicación de empresarios y políticos.

Es un primer paso, pero ya es mucho más de lo que se había logrado en los últimos años. El paso que verdaderamente dará inicio al proceso que debe concluir con la construcción de la carretera es la redacción del proyecto, que será elaborado por la Demarcación de Carreteras para posteriormente remitirlo a la Dirección General de Carreteras para su aprobación en un plazo de tres o cuatro meses, explicó Moragues al alcalde de Oliva.

«Es un paso más para hacer realidad esta importante infraestructura para Oliva y toda la comarca de la Safor. El ministro de Fomento se comprometió a impulsar todos los trámites para avanzar en las infraestructuras de la Comunitat y este es un ejemplo claro de ello», dijo Moragues.

La variante de Oliva supone una inversión de 28,9 millones de euros. Una vez esté terminada, el objetivo es que sirva para reducir el tráfico pesado por la carretera que cruza y divide en dos el casco urbano. Esto aumentará la seguridad vial y la calidad de vida de los vecinos de la zona, que, como se expuso en un estudio llevado a cabo por expertos en acústica del Campus de Gandia de la Universitat Politècnica de València, en el que se apunta que los vecinos de la zona están expuestos a niveles de ruido muy por encima del mínimo que marca la ley.

Según la Delegación del Gobierno, en los Presupuestos Generales del Estado hay una partida presupuestaria de 100.000 de euros para la licitación del proyecto.

El objeto de esta obra es el de ejecutar, utilizando la AP-7, una variante de la actual travesía de la N-332 de Oliva, de modo que se pueda conectar con la AP-7 en el tramo sur, regresando a la N-332 al norte de Oliva a través del enlace existente actualmente en el peaje.

El proyecto consta de una carretera bidireccional de 2,5 kilómetros, con dos carriles de 3,5 metros de ancho y arcenes de 1,5.

Está previsto realizar un enlace tipo trompeta con la AP-7 y un enlace con glorieta inferior en la conexión con la actual N-332.

Esta infraestructura permitiría de momento sacar los vehículos pesados de Oliva pero si finalmente se libera la AP-7, como reclaman desde los municipios del sur de la comarca al Gobierno, su impacto será mayor para la ciudad, en tanto que todos los vehículos podrán ya utilizar sin necesidad de pagar peaje.

Por ese motivo, después de años de incumplimientos y retrasos, ahora Fomento acelera el paso para intentar que la obra anunciada ahora coincida con la liberalización del peaje de la autopista, algo que ocurrirá el 1 de enero de 2020.

El alcalde, David González, quiso huir de triunfalismos, pero destacó «el trabajo conjunto y persistente» que se está haciendo desde el ayuntamiento de manera coordinada con la Delegación de Gobierno. El primer edil reconoció que «no esperaba una aprobación tan rápida» de la Declaración de Impacto Ambiental.

Todos los partidos se felicitan

El portavoz de Projecte Ciutadans d'Oliva, Blai Peiró, también valoró con prudencia este anuncio, y apuntó que «todo lo que sea avanzar es positivo para nuestra ciudad». Además, recordó que «nosotros siempre apostamos por la opción del enlace sur, porque era la más viable y, además, importante para las playas sur de la ciudad y para nuestras empresas».

Desde EU-Acord Ciutadà, Àlex Salort, indicó que supone «una buena noticia para la ciudad» porque, a su entender, «todo lo que sea avanzar supondrá que cada vez nos encontramos más cerca del final de este proyecto».

El portavoz de Gent d'Oliva, Pepe Salazar, por su parte, indicó que ahora «es necesario que en los próximos presupuestos del Estado aparezca consignado este proyecto. Pero todo lo que sea avanzar siempre es positivo».

Desde el PP, el portavoz del grupo municipal, Salvador Llopis, se mostró «muy satisfecho» por este anuncio, que, a su entender, demuestra que «desde el Gobierno se está dando solución a este gran problema que tenemos en Oliva. Por tanto, desde el PP agradecemos esta tarea».

Por último, el portavoz del PSPV, Carlos Mengual, advirtió de que «estaremos pendientes de que los plazos se cumplan y no sea un anuncio más por parte de los responsables del gobierno central».