Una veintena de alcaldes, portavoces municipales y secretarios locales del PSPV-PSOE de la Safor formó ayer en Bellreguard una plataforma de apoyo a Ximo Puig, presidente de la Generalitat, para que siga al frente de la secretaría general del PSPV. Puig presentó ayer su candidatura a ese cargo, y tendrá como rival a Rafael García, alcalde de Burjassot, del sector de Pedro Sánchez.

Lo más significativo del encuentro de ayer en Bellreguard es que en el apoyo a Ximo Puig están dirigentes del PSPV de la Safor que, en las pasadas primarias del PSOE, respaldaron a los tres candidatos que se presentaron. A modo de ejemplo, allí estaban la alcaldesa de Gandia, Diana Morant, que apoyó a Susana Díaz, la exalcaldesa Pepa Frau, que se desvivió por respaldar a Patxi López, y Víctor Borràs, secretario de la agrupación de Tavernes de la Valldigna, partidario de Pedro Sánchez.

Los alcaldes de Bellreguard, Benirredrà, Beniflà, el Real de Gandia, Beniarjó, la Font d'en Carròs, Alfauir, Llocnou de Sant Jeroni y Rafelcofer también estuvieron en el encuentro, así como el de l'Alqueria de la Comtessa, que además es presidente de la Mancomunitat y en unos días accederá a un escaño en la Diputación de València. Dirigentes de Ador, Piles y Potries expresaron con su asistencia el apoyo a Puig.

Entre las ausencias, sin duda la más significativa la de Oliva, una agrupación dirigida por Carlos Mengual que no solo mostró su apoyo a Pedro Sánchez, sino que criticó duramente la decisión del PSOE de apoyar la abstención en el congreso que permitió la investidura de Mariano Rajoy como presidente del Gobierno.

La batalla por la secretaría general del PSPV ya ha empezado. Mañana se abre el plazo para la recogida de avales de apoyo a los candidatos, y el domingo 16 de julio tendrá lugar la votación de las primarias en las que los militantes determinarán el próximo líder del partido. Los días 29 y 30 de julio se celebrará el congreso que ratificará a la Ejecutiva. La mayoría de dirigentes están con Puig, pero los socialistas han puesto en manos de sus militantes las decisiones trascendentes y es difícil calcular el resultado.