Otra vez un accidente entre dos vehículos, otra vez en Oliva y, otra vez, la droga como protagonista. La N-332 a su paso por el sur de la comarca de la Safor se ha convertido, en el último mes, en el paradigma de un fenómeno, que, con toda seguridad, está ocurriendo en un importante número de carreteras en toda España, el de la inconsciencia de mezclar alcohol, drogas y el volante, en este caso con resultados incluso trágicos.
Según ha podido saber este periódico, el pasado miércoles fueron detenidos en un camino rural de Oliva, próximo a la N-332, dos conductores por conducir bajo los efectos de la cocaína. La Guardia Civil acudió al lugar porque dos vehículos habían sufrido una colisión sin consecuencias graves.
Según las primeras hipótesis, el conductor de una furgoneta de la marca Citroën se saltó una señal de Stop colisionando con una motocicleta Yamaha en el camino de Las Cantadas, en el término municipal de Oliva. Tras las pertinentes comprobaciones, los agentes realizaron la prueba de drogas a los dos conductores, resultando esta positiva en cocaína. Esto provocó la detención de ambos, de 29 y 30 años, y su traslado al cuartel.
No venían de fiesta, ni siquiera era de noche. El accidente tuvo lugar alrededor de las 13 horas de un miércoles.
Este nuevo caso de drogas al volante llega en un momento de especial sensibilidad en la cuestión del tráfico después de que cuatro personas hayan fallecido en algo más de un mes, en casi el mismo punto kilométrico de la N-332 en el término municipal de Oliva y por circunstancias prácticamente idénticas, las de un conductor que, tras una noche de fiesta, tuvo la fatal ocurrencia de coger su coche y acabó embistiendo a ciclistas que habían salido a hacer su ruta semanal.
Este nuevo accidente, en todo caso, viene a demostrar que no solo hay que estar especialmente atento los sábados por la noche o los domingos por la mañana. Más bien se precisa de una solución integral por parte de las autoridades que tienen competencias.
Estos casos han despertado conciencias sociales pero también han obligado a las autoridades a actuar. No en vano, el fin de semana pasado ya se reforzó la zona con mayor presencia policial y controles de alcohol y drogas a conductores, tanto por parte de la Guardia Civil como de la Policía Local de Oliva.
Escandaloso 45 de positivos
El resultado, sin embargo no pudo ser más desalentador. Hasta once personas dieron positivo por conducir bajo los efectos del alcohol a primeras horas de la mañana del domingo y tres por drogas. Un total de 14 conductores que no circulaban en las condiciones óptimas para controlar sus vehículos.
Durante la pasada semana, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil realizó en la Comunitat Valenciana un total de 12.963 pruebas de alcohol, de las cuales 183 fueron positivas, lo que representa el 1,41%. Por lo que se refiere a las pruebas de drogas, se realizaron 84, de las cuales 38 fueron positivas, el 45,23 %, un número muy elevado.
