La mayoría de alcaldes y portavoces municipales de Compromís de la Safor arroparon ayer al diputado Joan Baldoví para denunciar el «maltrato» que el Gobierno de España está llevando a cabo con los valencianos, y especialmente con los ciudadanos de la comarca, por la falta de inversiones en proyectos que se reivindican desde hace décadas.
Con todos ellos estuvieron también representantes de los empresarios, como Rafael Juan, presidente de la Federación de Asociaciones de Empresarios de la Safor (FAES), y Ramón Soler, presidente del Círculo de Economía de la Safor (CES).
No es novedad que se produzca la presencia de empresarios en un acto de elevada carga política. Como dijo Rafael Juan, la mayoría de los proyectos que se reivindican al Gobierno de España, y algunos a la Generalitat, forman parte del paquete de demandas que la patronal comarcal viene solicitando como algo fundamental para que las empresas de la Safor no pierdan en competitividad y para que los ciudadanos de estos municipios sean tratados como los del resto.
Ante la estación de ferrocarril de Gandia, Joan Baldoví señaló que, durante sus seis años en el Congreso de los Diputados, ha podido comprobar que los presupuestos generales del Estado «castigan a los valencianos en general y a la Safor en particular».
A partir de ahí, los alcaldes de Oliva y Guardamar de la Safor, y el exalcalde de Xeraco, respectivamente David González, Rosana Seguí y Francesc Serralta, detallaron la retahíla de incumplimientos, suspensiones, olvidos y atrasos de la Administración del Estado, en algunos casos, como el del tren Gandia-Oliva-Dénia, acumulando cuarenta años de clamor popular por una obra que se considera necesaria.
Además de este proyecto, que figura en los anales de las promesas vulneradas gobierno tras gobierno y presupuesto tras presupuesto, se llamó la atención por la no ejecución de las rondas de circunvalación de la N-332, la no liberalización del peaje de la autopista, la paralización del plan contra inundaciones de Oliva y la suspensión del que se proyectó para la zona de la Valldigna y Xeraco. También el hecho de que, pese a los estudios técnicos existentes, no se hayan llevado a cabo obras para evitar que los temporales marinos acaben llevándose grandes cantidades de arena en distintos tramos de la costa comarca.
A todo ello, Rafael Juan, en nombre de FAES, recordó también la necesidad de terminar la autovía de Gandia a l'Olleria y su conexión con la autopista AP-7, un proyecto que corresponde a la Generalitat.
Aunque convocados por Compromís, lo de ayer en la estación de ferrocarril de Gandia parecía un preludio de la manifestación que, probablemente en octubre, el Consell de la Generalitat convocará en València, con la pretensión de que sea unitaria, para exigir el fin de la discriminación presupuestaria y una financiación más justa para la Comunitat Valenciana.
