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Gandia denuncia el boicot a tres actos de celebración del orgullo LGTBI

La vicealcaldesa condena estas acciones y defiende que la ciudad está a favor de la diversidad

Gandia denuncia el boicot a tres actos de celebración del orgullo LGTBI àlex oltra

Por muy avanzada que se autoproclame la sociedad, siempre ocurren hechos que suponen un auténtico bofetón de realidad, acciones que vuelven a instalar en el desasosiego hasta a los más entusiastas. Esta situación ocurre habitualmente al colectivo LGTBI. Existen hechos que se califican como muy graves por su envergadura, como pueden ser las agresiones homófobas y los insultos que sufren las personas homosexuales solo por su condición. Sin embargo, no menos graves, ocurren a diario acciones que demuestran que aún queda mucho camino.

En Gandia acaba de ocurrir. Durante el último mes, el consistorio ha programado distintos actos entorno al día del orgullo LGTBI. Hasta tres de estas actividades han sido boicoteadas como una burla o para evitar que se celebraran.

El primero de estos actos vandálicos lo sufrió una de las fotografías que formaban parte de la exposición «Gèneres», de Joss Manz, ubicada en el Mercat del Prado. En concreto, el ataque fue contra la imagen de un joven intersexual. En esta imagen apareció una pintada en forma de pene y testículos hecha con bolígrafo.

El segundo boicot lo sufrieron las luces arco iris que el ayuntamiento instaló en la fachada para iluminarla con la bandera representativa del colectivo LGTBI. Esta había sido programada para que se encendiera cada día a las 21 horas. Mientras se celebraba otro acto en la plaza Major se comprobó que los focos no arrancaban. Entonces se descubrió que la caja en la que estaba el reloj que regulaba la hora del encendido había sido manipulada para que no arrancara.

Por último, durante el concierto del grupo Mantequilla de Colores que se celebraba hace unos días en la plaza del Prado, hubo un apagón de la iluminación y el sonido. Algunos testigos vieron salir a dos personas corriendo de la zona en la que se encontraba el grupo electrógeno que daba permiso al escenario después de comprobar que alguien lo había desconectado.

La vicealcaldesa, Lorena Milvaques, mostró ayer su repulsa por estos hechos e indicó que «Gandia es una ciudad que está por la diversidad y que no va a permitir este tipo de acciones homófobas contra la libertad de las personas». Milvaques también señaló que estos hechos evidencian que sigue siendo necesario reivindicar la libertad y el respeto hacia todas las personas sea cual sea su condición sexual.

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