El Ayuntamiento de Gandia ha remitido a tres establecimientos hoteleros de la playa una notificación que puede derivar en sanción y cierre de las terrazas al aire libre, en el caso de que incumplan la normativa de apertura de esos recintos o superen los niveles sonoros máximos autorizados o el horario de apertura.

Las notificaciones, reveladas ayer por el grupo municipal del PP, responden a las protestas de vecinos que residen en zonas cercanas a esos tres hoteles por molestias ocasionadas por el ruido.

En estos escritos, el responsable de Urbanismo, Vicent Mascarell, señala que, debido a las protestas, el ayuntamiento está obligado a actuar y a exigir que los establecimientos reúnan todos los permisos y licencias y, en el caso de que las terrazas acojan música o espectáculos al aire libre, cumplan la ley, los niveles sonoros y los horarios.

Se trata de un paso más del Ayuntamiento de Gandia en la línea de evitar que, como ha ocurrido en años anteriores, los ciudadanos recurran a la vía judicial y acusen a la Administración local de «inactividad» ante estos casos, lo que ya ha costado muchos miles de euros en indemnizaciones fijadas por los tribunales.

El responsable de Urbanismo, Vicent Mascarell, señaló ayer que no se trata de remitir escritos para cerrar las terrazas, pero sí de advertir a las empresas hoteleras que están obligadas a cumplimentar todo el procedimiento para que esos espacios tengan licencia, algo de lo que carecen los tres hoteles advertidos.

Según Mascarell, en fechas recientes se mantuvo una reunión con los representantes hoteleros de Gandia y la playa, a quienes se les hizo saber, entre otros muchos aspectos, que lo correcto es cumplir las normas y, en la medida de lo posible, causar las menores molestias posibles, dado que, si existen quejas, el ayuntamiento está obligado a actuar.

Los hoteles que presenten quejas vecinales deberán contar con un controlador y limitador de potencia sonora conectado a internet y también realizar un estudio sobre la repercusión del sonido que sale del establecimiento con el fin de que llegue a las fachadas de otros edificios residenciales con una intensidad que no perjudique a los moradores.

«Petición desproporcionada»

Las notificaciones que ha remitido el ayuntamiento a los tres establecimientos de la playa ha generado, a su vez, la reacción de la Asociación de Hoteles de Gandia, que consideran «desproporcionadas» las exigencias del ayuntamiento y consideran que los gastos que pueden presentar los estudios acústicos y el limitador de sonido rondaría los seis mil euros.

En comparación a Benidorm, dicen los hoteleros en su escrito que allí es la Policía Local la que lleva a cabo las mediciones y levanta acta si se superan los niveles permitidos.

La Asociación de Hoteles, que pide la paralización del expediente sancionador a los establecimientos notificados, concluye que sea en una Mesa de Turismo, donde, de forma pausada, se aborden estos temas y no que surjan en plena temporada turística, cuando los hoteles están en plena actividad. También solicitan más control contra las despedidas de soltero y el botellón en las calles.