El Ayuntamiento de Gandia parece haber encontrado la fórmula perfecta para que los parkings del centro de la ciudad, el del Serpis (ahora Centre Històric) y el del Prado, dejen de ser, a la larga, un lastre económico para las arcas municipales. Queda mucho para eso, más que nada porque la ciudad acaba de pagar casi 10 millones de euros para recuperar la gestión del segundo, pero, al menos, su funcionamiento diario ha dejado de ser deficitario.
Medidas como reducir los precios de los abonos mensuales para los vecinos de Gandia, de implantar también tarifas para los que llegan de fuera a trabajar a la ciudad u ofrecer plazas gratuitas a quines compren en los comercios del Centre Històric han provocado que la explotación de estas instalaciones subterráneas deje de ser deficitaria. O lo que es lo mismo, los parkings han pasado de estar prácticamente vacíos a haber lista de espera para poder adquirir un abono.
Según explicó ayer el coordinador de Economía y Hacienda, Salvador Gregori, el ayuntamiento obtiene actualmente unos ingresos superiores a los 600.000 euros por los abonos que pagan los usuarios de estos dos aparcamientos. Por contra, los gastos de explotación anuales, que incluyen mantenimiento, salarios, etc, ascienden a 200.000 euros. Eso indica, por tanto, que el ayuntamiento obtiene un beneficio de 400.000 euros por el funcionamiento de estas dos grandes infraestructuras.
Lo que vienen a indicar estos datos es que, al menos de momento, las iniciativas que está poniendo en marcha el consistorio para revitalizar los parkings están resultando apropiadas.
Sin embargo, a la ciudad aún le quedan muchos años por delante para que, contablemente, estas infraestructuras que se construyeron durante el mandato de José Manuel Orengo, dejen de ser realmente deficitarias. Y es que, recuperar estas faraónicas obras le costará al ayuntamiento cerca de 21 millones de euros, un dinero con el que las arcas municipales no cuentan y que han salido a través de dos fórmulas: Por una parte del Fondo de Reestructuración, un recurso con el que cuenta el Estado para facilitar préstamos a ayuntamientos con problemas que tengan que pagar sentencias, como es el caso del párking del Centre Històric y, por otra, a través de un préstamo ordinario que ha negociado el ayuntamiento con una entidad bancaria.
El consistorio está obligado a devolver mes a mes estos préstamos de 21 millones, cuya amortización anual no cubren aún los 400.000 euros de beneficios que se consiguen con la explotación de los aparcamientos.
Salvador Gregori compareció ayer con la concejala de Promoción Económica, Alícia Izquierdo y el edil de Ciudadanos, Ciro Palmer, para presentar las últimas novedades con respecto a los párkings. Además de explicar que ya se ha suscrito el préstamo de casi 10 millones para pagar la liquidación del Prado, Izquierdo explicó que se va ampliar de los 25 previstos a 80 puestos para que las bicicletas puedan estacionaren el interior de las instalaciones de forma gratuita.
Por su parte, Ciro Palmer, recordó que la medida de recuperar y poner en valor estos espacios del centro de Gandia estaba en su programa electoral y que fue su partido, Ciudadanos, el que instó al gobierno a lanzar la iniciativa. «Es una prueba del comportamiento que tenemos en Ciudadanos, a pesar de estar en oposición, siempre intentamos aportar ideas de manera positiva, los resultados son satisfactorios y todos estos lugares ayudan al comercio ya la restauración de la zona», indicó.
