El Ayuntamiento de Gandia quiere abrir los refugios que los vecinos construyeron durante la Guerra Civil para protegerse de los bombardeos para que puedan ser visitados por los turistas y vecinos y dar a conocer la historia de estas infraestructuras. Será un concepto entre museo y centro de interpretación que estará a disposición de grupos que deseen buscar los resquicios de la historia de la capital de la Safor.

Para ello, el departamento de Patrimonio que dirige Xavi Ròdenas ha organizado un curso de Guias de Memoria Democrática que tiene como objetivo formar y acreditar a profesionales de esta rama turística para que puedan ofrecer visitas a los monumentos subterráneos de la ciudad.

La formación, de 20 horas de duración, se llevará a cabo del 11 al 15 del próximo mes de septiembre y está destinada solo a aquellas personas que ya ejerzan de guías en la ciudad y que quieran especializarse en la interpretación de la Guerra Civil española, su entorno y histórico y consecuencias. El objetivo es ofrecer una formación general, local y con perspectiva sobre diversos aspectos de la historia de la II República y la Guerra Civil, la memoria democrática, el patrimonio y la importancia del archivo en referencia a este periodo, explicó ayer el concejal Xavi Ròdenas.

La realización de este proyecto formativo, pionero en la Comunitat Valenciana, responde, indicó el concejal, a «la necesidad de contar con un grupo de guías bien preparados y que puedan interpretar de manera correcta un tema tan sensible como es este».

Para la formación, el ayuntamiento contará con la colaboración de la Universitat de València y su departamento de Memoria Democrática.

Una vez acabe el curso, los participantes recibirán un carnet expedido por el propio ayuntamiento con el que se acreditarán como guías oficiales de los refugios de Gandia. El ayuntamiento, posteriormente, echará mano de ellos para poder organizar visitas guiadas y crear un producto turístico con esta infraestructura.

Se prevé que el centro de interpretación abra después de la Fira i Festes, ya que se trata de un proyecto «muy interesante», ya que «no habíamos contado con un espacio físico donde poder recordar esta época y poder educar a las personas en lo que fue el drama de la dictadura y la Guerra Civil», indicó Xavi Ròdenas.

Hace unos meses, el ayuntamiento presentaba la rehabilitación del refugio de la Peixatera, ubicado bajo el antiguo edificio del Mercat Municipal, detrás del ayuntamiento. En el proyecto se invirtieron 30.000 euros que han servido para adecuar el espacio, instalar carteles informativos e iluminarlo.

Joan Cardona, arqueólogo municipal de Gandia y uno de los docentes del curso, apuntó ayer que «en 1938 se calcula que cayeron sobre Gandia alrededor de 2.000 bombas, entonces los túneles se convirtieron en una salida y entrada de recursos».