La UD Oliva ha informado a la Federación de Fútbol de la Comunitat Valenciana del mal estado actual de las instalaciones del Camp del Morer para que se puedan subsanar lo antes posible. Una representación de la junta directiva y el concejal de Deportes y teniente alcalde de la ciudad, Blai Peiró, se entrevistó hace unos días con el secretario general de la Federación, Salvador Gomar.

Levante-EMV que «informamos a la Federación de cómo se encuentra el terreno de juego, la iluminación artificial y otras cuestiones. Es verdad que los vestuarios si que están acondicionados, pero hay otras deficiencias».

El dirigente del conjunto olivense manifiesta que «hemos quedado para otra reunión, donde les tendremos que hacer entrega de otros informes que nos han solicitado. Las instalaciones pertenecen a la Real Federación Española de Futbol, pero nosotros hemos ido a la Valenciana para que informe al órgano superior».

Ancio recuerda que «cuando la actual directiva cogió las riendas del club nos hicimos cargo de arreglar algunas cosas, entre ellas el túnel de vestuarios que estaba en un estado lamentable. Tampoco había suficiente iluminación porque solo funcionaban once de veinte focos. Nosotros los arreglamos, pero ahora ya se han vuelto a estropear otros y ese dinero que nos hemos gastado ahí no lo hemos podido disponer para otras cosas».

El vicepresidente añadía que «el sistema de riego tampoco funciona bien, hay parte de las gradas que parece que vayan a caer, el terreno de juego también presenta un mal estado. Hemos informado a los federativos de cual es la situación y les hemos invitado a que vengan y lo vean sobre el terreno».

Una historia de 35 años

El Camp del Morer fue inaugurado en el mes de junio del año 1982, siendo propietario del mismo la Real Federación Española de Futbol representada en la Comunitat Valenciana por su delegación presidida por Vicente Muñoz.

Desde entonces han pasado 35 años de fútbol en la ciudad de Oliva, de uso intenso por parte del club titular y por su gran cantera.

A principios de los años 90, cuando la UD Oliva consiguió el ascenso a la 2ª división B, empezaron las mejoras con la instalación de las grandes torres de iluminación artificial.

No sería ya hasta principios del año 2006 cuando se procedió ha hacer una inversión de envergadura y se cambió el césped natural a césped artificial, mejora muy considerable, ya que el césped natural del Camp del Morer tenía un mantenimiento muy costoso y era de los pocos que quedaban en la comarca de la Safor.

En octubre de 2007 sería el propio presidente de la Federación de Fútbol de la Comunitat Valenciana, Vicente Muñoz quien se reunió con técnicos y responsables municipales para abordar las obras de mejora de las gradas del Camp del Morer, que presentaban un estado lamentable.

En enero de 2008 comenzó esa reforma, pasando de un aforo de 750 a cerca de 3.000 espectadores. La mejora de las gradas de tribuna no incluía la cubierta, reivindicación histórica de la afición del club olivense.

En 2013, las quejas de varios equipos visitantes por el lamentable estado de los vestuarios motivaron su remodelación.