En contra de lo que la mayoría piensa, en algunas ocasiones la Administración es capaz de demostrar que puede gestionar mejor que las empresas privadas. Y uno de esos ejemplos lo ha protagonizado el Ayuntamiento de Gandia con los párkings que, hace un año, empezó a rescatar de las empresas concesionarias que los construyeron.
Hasta septiembre de 2016 el ayuntamiento, en virtud del contrato de concesión, tenía que abonar cerca de medio millón de euros al año para afrontar el llamado «equilibrio presupuestario» del párking subterráneo de la plaza del Prado. La empresa perdía dinero porque el volumen de negocio era escaso. Los gandienses no se sentían llamados a entrar en el párking y pagar los abonos.
Tras asumir una deuda de diez millones de euros, algo para lo que le autorizó el Ministerio de Hacienda, el ayuntamiento recuperó ese párking y empezó a gestionarlo directamente. Lo primero que hizo fue bajar precios para hacer atractivo el «producto», y los ciudadanos han respondido mejor de lo que se esperaba.
El resultado lo dieron anteayer la vicealcaldesa de Gandia, Lorena Milvaques, el coordinador de Economía, Salvador Gregori, y el concejal Ciro Palmer.
Resumiendo, en este año de gestión pública municipal los ingresos totales han sido de 420.776 euros, un 21,4% más que el año anterior, cuando era de gestión privada. El flujo de rotación de vehículos se ha incrementado en un 27,9%, y el número de usuarios con abono para utilizar el párking ha pasado de 128 a los 400 actuales, lo que supone un incremento del 212%.
Además de precios más bajos, lo que, como publicó el martes este periódico, también ha arrastrado a reducciones de tarifas en párkings privados de la ciudad, el ayuntamiento concibió abonos para distintos usuarios, atendiendo a las necesidades de la mayoría, y todo ello ha desembocado en el objetivo deseado. El párking ahora se llena y, cuestión no menos importante, los beneficios van a repercutir en el conjunto de la ciudadanía.
Gandia tendría que haber pagado a la empresa concesionaria medio millón al año, sumándole intereses, durante unos cuarenta años más. Con esta solución, y descontando el iva, a razón de ingresos de 420.000 euros anuales se podrá liquidar la hipoteca de diez millones de euros que se abonó en 2016 en un periodo que va de los 25 a los 30 años, diez menos que con la gestión privada.
El sistema se repite ahora con otro gran párking, el del Riu Serpis, que se construyó antes que el del Prado. El ayuntamiento ha recuperado la concesión, ha pagado otros 10 millones y ha pasado a gestionarlo directamente.
