Las autoridades de la Comunitat Valenciana mostraron ayer su respaldo absoluto a las empresas de la Safor. Y lo hicieron personalmente, al acudir a la décimo octava gala anual de la Federación de Asociaciones de Empresarios de la Safor (FAES), desarrollada en el Aula Magna del Campus de la Universitat Politècnica de València (UPV), en el Grau de Gandia.

Ximo Puig, presidente de la Generalitat, Enric Morera, presidente de les Corts, y Juan Carlos Moragues, delegado del Gobierno de España en la Comunitat Valenciana, estuvieron entre quienes arroparon a los empresarios de la Safor. Además, asistieron numerosos alcaldes de la comarca, con Diana Morant como anfitriona, y el director del Campus de la UPV, Jesús Alba. Por la patronal autonómica, el presidente de la Confederación Empresarial Valenciana, Salvador Navarro y el presidente de la Cámara de València, José Vicente Morata.

La gala se reconoce a las seis empresas premiadas del año, pero, más que eso, traslada la simbiosis entre las Administraciones y el tejido empresarial como arma esencial para seguir innovando y generar empleo y riqueza.

A eso se refirió Ximo Puig en su alocución. El presidente del Consell confesó que este acto suponía «vitamina» porque «es aquí donde se aprecia la realidad y la vitalidad de la sociedad valenciana y de su ambición de futuro».

Puig hizo referencia a la incertidumbre que genera el desafío independentista catalán y señaló que el debate sobre ese proceso debe situarse «en la ley y en el diálogo, ese lugar en el que los valencianos siempre queremos estar». El jefe del Consell insistió en la necesidad de «crear escenarios de credibilidad y honradez» porque son lo más importante «para generar la esperanza y la estabilidad que es básica para la economía».

«La Safor, garantía de futuro»

Finalmente, lanzó un mensaje de optimismo para con esta comarca. «La Safor tiene vida, tiene fuerza y tiene garantías de futuro», gracias al sector empresarial, pero lamentó que «el motor público siga gripado por culpa de no disponer de una financiación adecuada y porque el Estado no invierte lo que le corresponde en la Comunitat Valenciana».

El presidente de les Corts, Enric Morera, trasladó el mensaje más reivindicativo. Por una parte trasladó su felicitación a las empresas premiadas, «porque gracias a vosotros tenemos una economía potente», pero después se disculpó, en nombre de todas las administraciones, «porque aún no disponemos de las infraestructuras necesarias para atender vuestras necesidades», momento en que volvió a reclamar, como hizo Ximo Puig, un modelo de financiación autonómico «que cumpla con la Constitución y el principio de igualdad entre todos los ciudadanos»

También tomó la palabra Juan Carlos Moragues, quien reclamó el consenso entre las administraciones para los retos de futuro, y recordó que el Gobierno de España está realizando infraestructuras, entre las que citó el acceso sur al puerto de Gandia, en fase de ejecución, o el anuncio del desdoblamiento de la vía férrea Cullera-Gandia que seguirá, aseguró, con la prolongación del tren hacia Oliva y la provincia de Alicante.

Por su parte, Rafael Juan, que aprovechó el acto para despedirse como presidente de FAES, dado que ya no ostentará ese cargo el próximo año, repitió ante los representantes de todas las administraciones la necesidad de llevar a cabo infraestructuras de todo tipo que esta comarca reclama desde hace muchos años para mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos y también la competitividad de las empresas que se asientan en la Safor.

En esa despedida, Juan agradeció la labor de todos sus colaboradores en FAES «en esta etapa difícil», y lanzó un mensaje de alerta a todos los empresarios. «En el mundo actual, con la cuarta revolución industrial en marcha, que nos lleva a un mundo sin fronteras, el futuro es impredecible y la planificación se ha convertido, a mi entender, en una lotería. La estrategia ahora es adelantarse al futuro y asumir que el cambio tiene que ser algo habitual». El presidente de FAES concluyó que, pese a todos los retos de futuro, entre los empresarios, los agentes sociales, la Administración y los sindicatos, la Safor, «que fue un ejemplo de desarrollo en el siglo pasado, puede y debe volver a serlo».

La gala concluyó con un vino de honor en las instalaciones del Campus gandiense de la Universitat Politècnica de Gandia.