El Ayuntamiento de Gandia ha iniciado el trámite para que el antiguo campo de fútbol de la Banyosa, donde hasta que se abrieron las instalaciones de Roís de Corella jugaba el Beniopa, pueda albergar un refugio municipal para acoger a los animales abandonados en la vía pública.

Según ha podido saber este periódico, el consistorio ha abierto el expediente para aprobar una modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que permita el cambio de usos de esta parcela, que pasaría de ser deportiva a estar destinada a servicios municipales.

El concejal de Gestión Responsable del Territorio, Xavier Ròdenas, confirmó a Levante-EMV que este es uno de los puntos que baraja el Gobierno local pero aclaraba que «hay más» y que «se están valorando otros espacios en la ciudad». Eso sí, reconocía que el campo de fútbol de La Banyosa reúne muchas condiciones que lo hacen viable para este menester. «Allí el gasto sería mínimo, porque hay valla perimetral, tiene agua y luz y, además, está en una zona apartada del casco urbano, que es un requisito muy importante y que siempre hemos tenido en cuenta a la hora de plantearnos hacer un refugio», explicaba.

Se da la circunstancia de que este solar, ahora completamente abandonado, se encuentra a escasos cien metros del refugio propiedad de la Sociedad Protectora de Animales y Medioambiente de la Safor (Spama).

Esta asociación mantiene un enfrentamiento con el ayuntamiento desde que, hace casi un año, el servicio de recogida de animales, que históricamente había prestado mediante un convenio, se adjudicó a la empresa El Corralet, a la que desde el colectivo animalista acusan de sacrificar a los perros y gatos que recogen en las calles de aquellos municipios en los que trabajan.

Ròdenas aclaró que, si finalmente el ayuntamiento se decanta por La Banyosa para ubicar el albergue municipal, no se hará con afán de venganza contra Spama, sino que es fruto de la casualidad que lo que en su día fue un campo de fútbol se encuentre tan cerca del albergue. De hecho, el concejal apunta que «no quedan muchos espacios púbicos donde poder abrir un centro de acogida para animales».

El edil explicó que el hecho de que se vaya a hacer un cambio de uso no implica que esta parcela sea el espacio elegido, sino que se realiza de ese modo porque «el procedimiento es muy largo y, por tanto, si empezamos ya avanzamos trabajo en el caso en que finalmente nos decantemos por esta parcela».