Un tramo del acceso sur al puerto de Gandia que ahora se está construyendo junto al hospital comarcal deberá desmontarse dentro de unos años para que, bajo ese vial de cuatro carriles, se pueda hacer el túnel por el que discurrirá el tren de Gandia a Oliva anunciado el lunes pasado por el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el Ministro de Fomento, Íñigo de la Serna.
A veces en la Administración se producen cosas así, pero en este caso el desaguisado, que puede acabar costando unos cientos de miles de euros, se hubiese podido evitar si el Ministerio de Fomento no hubiese tomado una decisión que fue criticada por el Ayuntamiento de Gandia, al que el tiempo le ha acabado dando la razón.
Porque el proyecto del acceso sur al puerto sí que contemplaba la construcción de un paso inferior para el futuro ferrocarril Gandia-Oliva justo en las inmediaciones del hospital. Pero he aquí la sorpresa que se llevaron técnicos del ayuntamiento cuando, hace algo más de un año, detectaron que ese túnel no se estaba haciendo. El departamento de Urbanismo remitió un escrito al Ministerio de Fomento exigiendo explicaciones por esa modificación del plan que nadie había anunciado, y la respuesta fue de lo más peregrina: el tren Gandia-Oliva había quedado diluido en el macroproyecto del Tren de la Costa, que aún no tenía estudio y, por lo tanto, no se sabía si seguiría el mismo trazado.
En el ayuntamiento no convenció la respuesta. Sea como sea, el tramo del ferrocarril hacia el sur tenía que pasar necesariamente bajo el acceso sur al puerto que se estaba construyendo, de manera que, aprovechando las obras y cumpliendo el proyecto inicial aprobado, el túnel ahorraría trabajo y dinero cuando finalmente se ejecutase la vía férrea programada. El Ministerio de Fomento se mantuvo en sus trece y siguió su programa sin escuchar la recomendación de Gandia.
Es ahora, en el momento en que la Administración acaba de anunciar el tren Gandia-Oliva que debería estar construido como mucho en siete años, cuando aquella decisión toma mayor protagonismo. Cuando se redacte el proyecto del tren, en ese punto se deberán contemplar dos alternativas. O bien se construye el túnel que ahora ya hubiese estado hecho, lo que obligaría a cortar el acceso sur, o bien la vía férrea sigue en superficie, en cuyo caso debería ser el acceso sur al puerto el que se elevara con un enorme puente sobre las vías y la infraestructura de alimentación eléctrica del ferrocarril.
Aunque el proyecto se tiene que redactar, lo más probable es que el tren que comunicará Gandia y Oliva discurra en paralelo o sobre el actual carril bici. Técnicamente es una obra sencilla, pero no cabe duda de que lo sería aún más si el túnel bajo el acceso al puerto se hubiese construido.
