El portavoz de Compromís per Gandia, Ivà Bonet, valoró ayer positivamente el cierre de la empresa pública IPG y «la valentía del Gobierno de Gandia por haber acabado con un agujero negro». «Cerrar IPG fue una promesa electoral y un asunto clave para el pacto de gobierno en Gandia», dijo bonet, quien añadió que el gobierno del PP y de Torró «se gastó 46 millones de euro a través de la cueva de Alí Baba que era Iniciatives Públiques Gandia».