Vivo de milagro. Así encontraron los operarios del servicio de recogida de basura de Tavernes de la Valldigna a un pequeño perro cuando realizaban su labor diaria la noche del pasado miércoles.

Alguien había arrojado al animal, que incluso llevaba puesta la correa, al interior de un contenedor de residuos orgánicos que se encontraba, en concreto, en la calle Gómez Ferrer, en las inmediaciones de las instalaciones del Club de Tenis.

En un primer momento, los trabajadores operaron como de costumbre. El que va detrás enganchó el contenedor al mecanismo que sirve para levantarlo e introducir las bolsas de basura en el interior del camión, donde se encuentra la prensa que sirve para apisonar los residuos. En ese momento no se dieron cuenta de la presencia del perro, que era de color oscuro y estaba mezclado con las bolsas de basura. En el momento en que iban a reiniciar la marcha uno de los dos escuchó los gemidos del animal. Entonces avistaron al pequeño can entre los residuos. Lo rescataron del interior del camión y durante varios minutos estuvieron acariciándole para que se sintiera protegido.

El animal parecía aturdido y apenas se movía cuando fue sacado de la parte trasera del vehículo. Tras varios minutos encima de él el animal espabiló y empezó a correr sin que sus rescatadores pudieran darle alcance para ponerlo en manos de alguna protectora o llevarlo al ayuntamiento.

Josep Clar, responsable de FCC en Tavernes, aseguraba ayer que fue «una suerte» que no muriera porque «no se puso en marcha la prensa en ese momento». Se trata del mecanismo que empuja hacia adentro las bolsas de basura y demás residuos para dejar espacio en la parte trasera del camión. De haberse activado en ese instante, lo más probable es que hubiera perecido aplastado.

Ayer, el propio alcalde de Tavernes, Jordi Juan, repudiaba, a través de las redes sociales, la acción de quien arrojó al animal a la basura sin mayor miramiento. «¿Cómo puede alguien hacer esto a un perro?», se preguntaba. Juan se mostró «muy decepcionado» porque, a su entender, «cuidar a nuestros animales también es hacer ciudad».

El alcalde vallero, además, hacía una reflexión: «¿Cómo vamos a esperar de esta gente que limpien los excrementos de sus perros si ni siquiera limpian los excrementos de sus perros?». Esa es otra batalla del ayuntamiento.

La Asociación Animalista de Tavernes de la Valldigna, por su parte, colgó ayer en las redes sociales un llamamiento para encontrarle una familia de adopción a este can.

Según explicaban a través de su perfil de Facebook, fue encontrado dentro del río Vaca al día siguiente de que escapara de las manos de los operarios de FCC tras ser rescatado del contenedor. Según explicaron, «alguien nos llamó para que lo sacáramos». En el mensaje de internet, la entidad señala que «necesita acogida» porque «ya ha sufrido bastante la maldad de la gente».

La imagen del animal en el interior del camión de la basura se viralizó ayer en las redes sociales y despertó la indignación de un gran número de internautas contra el autor o autores de la acción.

Gatos entre la basura

El responsable del servicio de recogida, Josep Clar, repudiaba, en conversación con este periódico, la acción llevada a cabo por quien tiró al perrito al contenedor. A su vez, explicó que «es habitual» hallar gatos junto a los restos de basura pero que estos «salen corriendo disparados nada más se abre la puerta del contenedor».

Además, denuncia la gran cantidad de residuos que los operarios municipales se encuentran en los recipientes de orgánicos y que no corresponde que se depositen ahí, como ahora bombonas de butano, por ejemplo.