Peatonalizar la plaza Major, trasladar la escultura de Ausiàs March frente al instituto que lleva su nombre, construir una pista de «bowl skate», revitalizar los pasajes comerciales Lombard y Brunel, crear un fondo para las personas dependientes o que el autobús sea gratuito para los jubilados que vivan en los barrios periféricos. Son algunas de las primeras propuestas que ya ha recibido el Ayuntamiento de Gandia para financiar con los presupuestos participativos, a los que el Gobieno local destina este año una partida de 200.000 euros.
Se trata de una iniciativa que se lleva a cabo por primera vez en la historia democrática de Gandia, confiando en la participación y en el debate de la ciudadanía. La intención es que esta partida vaya en aumento y esté reflejada en la Carta de Participación Ciudadana de Gandia, con independencia del color político de las corporaciones futuras.
Esta primera fase de recogida de propuestas se canaliza a través de la página en internet «participagandia.org», que se puso en funcionamiento hace una semana. Por ahora han llegado casi 50 (se pueden consultar todas en el portal), aunque todavía hay de plazo hasta el 18 de marzo para que cualquier vecino, asociación o colectivo (excepto los partidos políticos) proponga los asuntos que considere oportunos. Hay vecinos, no obstante, que plantean más de una, cosa que por otra parte no impiden las bases.
Los requisitos es que estén localizadas en Gandia y que cada una tenga un presupuesto máximo de 50.000 euros, al menos de forma aproximada, para poder repartir la cantidad entre tres proyectos. No podrán referirse a servicios municipales que ya estén en funcionamiento. Después, los técnicos evaluarán la viabilidad de las mismas y tras una selección se someterán a votación.
El concejal delegado de llevar a buen puerto este proceso, Nahuel González, de Més Gandia, se muestra satisfecho por la acogida de esta primera fase. «La ciudadanía está demostrando que estos presupuestos eran necesarios y que quiere participar, así es como se construye una verdadera democracia», señala.
Eso sí, es indispensable que de forma paralela se aprueben los presupuestos municipales para 2018, donde se contempla esta partida. Las cuentas, de momento, van con retraso, aunque el Gobierno confía en llevarlas al pleno a finales de este mes de marzo.
