El edificio de viviendas de la calle Perú 57 de Gandia, donde se han producido episodios conflictivos entre residentes y «okupas», entre ellos una agresión entre clanes familiares que terminó con un joven muerto y varios heridos, dejará de tener uso residencial.
Así lo ha señalado a este periódico el concejal de Administración, José Manuel Prieto, quien el lunes pasado anunció que la Junta de Gobierno Local ha dado el último paso para tomar posesión de este edificio, fruto de un conflicto con la empresa Immobles Reunits Catarroja, que lo construyó, sin terminarlo, y posteriormente lo abandonó, lo que ha propiciado la ocupación de muchos pisos.
La decisión del ayuntamiento es, en primer lugar, resolver el contrato con la empresa que se quedó el concurso, convocado en 2008 por el ayuntamiento para levantar el inmueble en suelo municipal y destinar los pisos a alquileres sociales. Ese acuerdo permitirá al consistorio, en un máximo de un mes, poder tomar posesión del inmueble. Eso probablemente suponga el inicio de un conflicto judicial con la empresa constructora, pero el Gobierno local está dispuesto a asumirlo para acabar con una situación que considera insostenible y que continúa degradando las viviendas.
En segundo lugar, se tendrán que realizar obras de rehabilitación del inmueble para adecuarlo a sus nuevos usos. Ahí es donde el Gobierno local, en boca del concejal Prieto, ha apuntado que, con toda seguridad, no se destinará a viviendas, sino que, a falta de concretar, serán otros los usos que acoja. Entre las posibilidades planteadas figura aprovechar el inmueble, situado muy cerca del instituto Tirant lo Blanc, para usos sanitarios o educativos.
Para el Ayuntamiento de Gandia la resolución del contrato con Immobles Reunits Catarroja «ha sido una prioridad» en los últimos meses, especialmente a partir de la reyerta mortal del pasado 3 de octubre que puso el foco en la insostenible situación del edificio, donde muchas de las viviendas, inacabadas, carecen de puertas, ventajas y otros elementos esenciales para su utilización.
Dinamizar el distrito de Corea
«Los objetivos de esta resolución son dotar al inmueble de nuevos usos, así como revitalizar y contribuir a la dinamización definitiva del distrito de Corea. Además, el ayuntamiento velará para impedir de nuevo conductas arbitrarias. Se buscará otorgarle usos distintos de los que han conducido a la actual situación de la parcela», ha señalado el ayuntamiento en un comunicado.
Prieto destacó «la importancia de esta medida, donde la actuación del ayuntamiento a la hora de rescatar el edificio ha sido el más riguroso posible según lo que marca la ley», y por eso se han tenido que invertir meses, cumpliendo los plazos fijados en cada paso, para, finalmente, entrar y tomar posesión del inmueble.
