Las Fallas de Tavernes de la Valldigna, como institución, están viviendo uno de los momentos más delicados de su historia más reciente. Si no se produce un giro de la situación en las próximas semanas, el del 2019 podría ser un ejercicio sin presidente de la Federació de Falles (FdF) y, por consiguiente, se eliminaría la figura de la Fallera Mayor del municipio.

Serán los máximos representantes de las seis comisiones festeras de la ciudad, junto con la concejala de Fiestas, Encar Mifsud, quienes tomen una decisión en las próximas semanas.

Actualmente, la entidad está descabezada después de que el último presidente, Carles Merenciano, renunciara a su cargo unos días después de finalizar las últimas fiestas falleras. Desde entonces se abrió un plazo de varias semanas para que algún fallero o fallera interesado en gestionar el devenir de la Federació de Falles presentara su candidatura. El plazo acababa el pasado lunes, cuando se celebraba la asamblea anual de la entidad, sin ningún nombre que optara a asumir el cargo.

De la reunión con los seis presidentes de las comisiones del municipio se esperaba que saliera y se aprobara una propuesta para la gestión del ente con el convencimiento de que no habría Fallera Mayor el próximo año. Sobre la mesa, según ha podido saber Levante-EMV, estaba la posibilidad de crear, por ejemplo, una gestora que llevara a cabo un trabajo administrativo.

Esta cuestión quedó aparcada y se decidirá en una nueva reunión que tendrá lugar los próximos días. La concejala Mifsud pidió expresamente a los presidentes dejar la decisión sobre la mesa para tratarla en los próximos días, ya que ella no podía estar presente en la asamblea del pasado lunes debido a que se encontraba en la sesión plenaria.

En este momento no está descartada ninguna opción. Lo que sí que parece es que el hecho de que el año que viene haya o no Fallera Mayor de Tavernes dependerá de si finalmente se encuentra una persona que asuma la presidencia de la Federació de Falles y, por lo tanto, se instale la normalidad institucional en la fiesta.

Lo que está claro es que ni la concejala ni los presidentes quieren repetir errores pasados y dejar el ente en manos de alguien sin experiencia, ya que entre el colectivo corre el convencimiento de que este hecho ha desprestigiado el organismo. Por ello, la idea es tratar de encontrar a una persona a la que le avale una trayectoria fallera, como la que tenían los últimos mandatarios de la FdF, que habían ejercido cargos de responsabilidad tanto en sus comisiones como en la propia Federació de Falles.

En caso de que finalmente no haya Fallera Mayor de Tavernes en 2019, el municipio perderá esta figura por segunda vez en su historia y justo cuando se cumple el décimo aniversario desde que se volvió a recuperar. En el año 2009 y tras 13 años de ausencia, la Junta Local Fallera, bajo la presidencia de Javier Fons, instauraba de nuevo el cargo coincidiendo con los 25 años de la fundación de la entidad. En 2011, se creaba también la figura de la Fallera Mayor Infantil y la Corte de Honor. Dos años más tarde, en el ejercicio 2013, desaparecía la máxima representante infantil pero se mantenía la Corte de Honor mayor. La actual Fallera Mayor es Begoña Bononad, que podría, por tanto, cerrar un ciclo en las fiestas del municipio.