El Ayuntamiento de Oliva ha retomado los trámites para poder acabar con otra de esas pesadillas urbanísticas, a las que tanto se ha tenido que acostumbrar en los últimos años, y dar una solución a los propietarios de las parcelas afectadas.
En este caso se trata del sector Canyaes 1, situada al sur de la carretera que va de la ciudad a la playa y que abarca una superficie total de 45.193 metros cuadrados.
Canyades 1 se aprobó en 2008, cuando el urbanismo en este país barría el territorio y ensanchaba el suelo edificable, especialmente en zonas que, como esta, se sitúan cerca del mar.
El problema es que, como revelaron los informes posteriores y ahora se ha especificado a los afectados, el Ayuntamiento de Oliva incurrió en numerosas irregularidades administrativas y técnicas que, en poco o en mucho, contribuyeron a prolongar los trámites y, después, desembocaron en la paralización de los trabajos. Hace cerca de cinco años que Canyaes 1 está parado y, como ocurrió en Aigua Blanca IV, el terreno afectado ofrece una imagen desoladora de calles cortadas, parcelas abandonadas e infraestructuras a medio terminar.
Lo que ahora ha hecho el Gobierno local olivense es situarse en el punto de la aprobación del plan parcial del sector. Según señala el consistorio, inmediatamente después se exigirá al agente urbanizador, Construcciones Just, que también ejecutaba las obras, a que subsane las muchas deficiencias existentes. En el caso de que eso no ocurra, el ayuntamiento se quedaría con la fianza económica depositada en su día, que asciende a casi 170.000 euros, y asumirá directamente la gestión para concluir los trabajos con el fin de que Canyaes 1 pueda declararse suelo urbano, momento en que todos los propietarios podrán solicitar licencias de obras.
Aunque no hay previsión de tiempo para el final del proceso, el alcalde de la ciudad, David González, señaló ayer a este periódico que la idea es dar los pasos legales sin dilaciones innecesarias.
Zona de viviendas aisladas
Además de los intereses de cada propietario, en Canyaes 1 también hay interés general. En esa zona no solo se habilitarán 2.694 metros cuadrados de áreas verdes y otros 3.362 para dotaciones públicas, sino que cualquier promotor podría construir y abrir un hotel o un locales comerciales siempre que la parcela disponible tenga más de 1.500 metros cuadrados.
El Ayuntamiento de Oliva, como casi todos los situados en la costa o con aspiraciones de promoción turística, está muy interesado en la implantación de más hoteles en la ciudad.
En la vertiente residencial, todas las viviendas serán aisladas, y las construcciones no podrán ocupar más del 65% de la superficie su parcela, según señala el plan urbanístico aprobado. Esta tipología sitúa Canyaes 1, como otras zonas desarrolladas en los últimos años entre Oliva y la playa, como un área residencial de alto nivel. De la superficie total, algo más de 16.000 metros cuadrados serán viales.
