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Son muchas las mujeres que sufren de varices que desfiguran sus piernas y de los síntomas que se asocian a ellas. El sistema vasculight, con un láser pulsado de alta energía, es eficaz en el tratamiento tanto de vasos superficiales, como de otros más grandes y más profundos. Podemos tratar con este láser las venas varicosas de los miembros inferiores y lesiones vasculares benignas como cuperosis, puntos rubí, hemangiomas, etcétera.
El tratamiento consiste en una foto-esclerosis de la lesión, la energía foto-lumínica produce la coagulación del vaso lo que conduce posteriormente a la atrofia de la pared vascular y la reabsorción del mismo. La eliminación definitiva de la lesión puede tardar varias semanas, dependiendo del tamaño y número de vasos tratados. El tratamiento provoca una cierta sensación de molestia, generalmente bien tolerada y que puede ser disminuida, en caso necesario, con la aplicación previa de una pomada anestésica. Como efectos secundarios, aparece un ligero eritema y edema en la piel que son transitorios. Existe un pequeño riesgo de reacciones adversas como son cambios en la textura y coloración de la piel o la aparición de quemaduras superficiales, todo ello transitorio con los cuidados adecuados. Son necesarias varias sesiones para completar el tratamiento y los vasos cerrados desaparecerán después de un tiempo.
Ventajas
1 Frente a otros láseres: Tiene como ventaja que alcanza una mayor profundidad en la piel, por lo que permite tratar lesiones más profundas.
2. Frente a la esclerosis de varices clásica: Que es un tratamiento no invasivo, es decir, no necesitamos pinchar para esclerosar el vaso y tampoco es necesario vendar la pierna tratada.
3. Otra de sus ventajas es el bajo riesgo de hipopigmentaciones, por su escasa o nula interferencia con la melanina.
